España acaba de pulverizar un nuevo récord absoluto de paro. El número total de desempleados ascendió hasta 4.910.200 personas al finalizar marzo, según la Encuesta de Población Activa (EPA) del primer trimestre de 2011, publicada este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Se trata de la cifra más elevada de la historia de España, al menos desde que existen registros oficiales (1976).
El número de parados se incrementó en 213.500 personas respecto al trimestre anterior, y en 297.400 si se compara con el mismo período de 2010 (un 6,45% interanual más). De este modo, la tasa de desempleo aumentó hasta el 21,29%, casi un punto porcentual más respecto al cierre de 2010 (20,3%) y más de un punto que la registrada un año atrás (20,05%). Esto significa que más de 1 de cada 5 españoles que quiere trabajar está desocupada.
Con esta cifra, la tasa de desempleo alcanza su nivel más alto de la serie histórica comparable, que arranca en 2001. De hecho, remontándose más atrás -utilizando series no comparables debido a los cambios metodológicos- no se alcanzaba un porcentaje de esta naturaleza desde el año 1997, año en el que el paro cerró el primer trimestre en el 21,3%.
Aumenta en todos los sectores
El desempleo aumenta en todos los sectores, especialmente en el sector servicios, que sumó 94.700 parados (6,71%), seguido de industria con 21.200 (9,15% más), agricultura con 17.200 (8,23%) y construcción con 3.300 más (0,75%).
El colectivo de parados de larga duración registró una subida de 60.100 personas (2,93% más) y acumula ya un incremento de 427.000 desempleados en el último año (25,43% más). También repuntó el paro en el colectivo de los buscan su primer empleo, con 17.000 desempleados más (4,76%)
Durante el primer trimestre, el desempleo aumentó en ambos sexos, aunque sobre todo entre las mujeres. De esta forma, el paro femenino creció en 123.800 personas (5,75%), mientras que el masculino se elevó en 89.800 personas (3,53%). Con estos datos, la tasa de paro masculina se situó en el 20,76%, casi un punto más que el trimestre anterior, y la femenina en el 21,94%, más de un punto por encima de la registrada al cierre de 2010.
Desagregando los datos por nacionalidades, el desempleo afecta en mayor medida a los españoles (165.700 parados más y un incremento del 4,6%), en tanto que los extranjeros en situación de desempleo subieron en 47.900 personas (4,37% más). Así, la tasa de paro de los españoles se situó en el 19,33%, casi un punto más que a cierre de 2010, mientras que la de los extranjeros aumento un punto y medio, hasta el 31,99%.
1,4 millones de hogares sin trabajo
Los hogares con todos sus miembros en paro aumentaron en 58.000, un 4,37% más respecto al trimestre anterior, hasta situarse en 1.386.000. En el último año, los hogares en los que todos sus miembros están en el desempleo se han incrementado en 87.500, un 6,74% más.
Al mismo tiempo, los hogares con todos sus miembros ocupados se redujeron en 154.600 en el trimestre (-1,68%) y en 129.000 en un año (-1,40%), y al terminar marzo sumaban 9.066.000 hogares.
La destrucción laboral continúa
Además, en el primer trimestre del año se volvió a destruir empleo, al caer la ocupación en 256.500 puestos de trabajo (-1,39%), situándose el número total de ocupados en 18.151.700 personas. La ocupación baja un 1,32% a nivel interanual, tasa similar a la del trimestre precedente: el empleo se ha reducido en 242.500 personas en un año, de las cuales 132.400 son asalariadas y 105.900 trabajan por cuenta propia.
La destrucción de empleo registrada en el primer trimestre del año afectó a todos los sectores, encabezados por la industria, que registró 82.000 empleos menos, seguida de la construcción, con 78.500 empleos menos, los servicios (74.600 empleos menos) y la agricultura, (21.300 empleos menos).
Por otro lado, la pérdida de puestos de trabajo afectó sobre todo a los españoles, con 178.500 menos, el 69,59% de los empleos destruidos entre enero y marzo. Los extranjeros, por su parte, perdieron 78.000 empleos, el 30% del total. La pérdida de ocupados se concentra, además, en los menores de 35 años.
Entre enero y marzo, el número de asalariados disminuyó en 193.400 trabajadores (-1,26%), de los que 54.300 tenían contrato temporal (-1,43%) y 1390.100 eran indefinidos (-1,21%). Además, se destruyeron 348.400 empleos a tiempo completo, aunque se crearon 91.900 puestos de trabajo a tiempo parcial, lo que supone un incremento del 3,72% en comparación con el trimestre anterior.
Por su parte, los trabajadores por cuenta propia descendieron entre enero y marzo en 59.300 personas (-1,92%), lo que situó el número total de empleados por cuenta propia en 3.024.800 personas, informa Europa Press.
Asimismo, el número de activos cayó en 42.900 personas, un 0,19% y se situó en 23.061.800 personas. La tasa de actividad cayó una décima, hasta el 59,88%. En el último año, el volumen de activos se ha incrementado en 55.000 personas (+0,24%).
La caída de la actividad se dejó sentir sobre todo en los varones, ya que, al finalizar marzo, un total de 18.000 mujeres más querían trabajar (+0,17%), con lo que la tasa de actividad femenina se situó en el 52,67%, casi una décima más. En cambio, entre los hombres, la actividad cayó en 60.900 personas en el primer trimestre, un 0,48% menos, hasta situar su tasa en el 67,73%, casi tres décimas inferior a la del trimestre anterior.
sábado, 30 de abril de 2011
viernes, 29 de abril de 2011
La Hora del Epitacio: Alejo Vidal Cuadras
*La sociedad española tardará bastantes años en reparar los destrozos de
este personaje *
* *
*Aleix Vidal-Quadras*
La crónica de una muerte anunciada ha llegado a su fin. José Luis Rodríguez
Zapatero, el quinto presidente del Gobierno desde la Transición, ha mordido
el polvo y abrumado por su fracaso, ha anunciado que renuncia a presentar
por tercera vez su candidatura. Aunque a la luz de su trayectoria previa ya
podía adivinarse, sus ahora perfectamente conocidas capacidades personales
han dejado palpable que el exigente oficio al que fue promovido por la
voluntad mayoritaria de su partido primero y de los españoles después
rebasaba con mucho sus posibilidades de desempeñarlo con acierto.
Equipado con un *expediente académico mediocre*, sin obra escrita conocida,
*carente de cualquier experiencia* profesional o empresarial de cierto
calado, *deformado* por la escuela de la *conspiración de pasillos* en la
estructura burocrática de una organización política de provincias,
prácticamente *inédito como parlamentario*, sin otro *idioma* que el propio
y este manejado con lenta, pobre y torpe premiosidad, *vacío de bagaje
intelectual* más allá de los cuatro lugares comunes del progresismo barato,
*impregnado del rencor hacia todo lo que represente excelencia *típico de
los mediocres, *limitado por la mentalidad aldeana* del que nunca ha
realizado actividad alguna en el extranjero, *desprovisto de escrúpulos
morales*, *incapaz* de *evaluar las consecuencias de sus disparates* e *
ignorante* incluso de los rudimentos de economía que posee un ejecutivo
medio de una pequeña compañía, el inefable ZP se encontró un buen día
catapultado a la máxima responsabilidad ejecutiva de una de las mayores
naciones de Europa.
Este experimento absurdo estaba condenado al desastre y así ha sucedido para
desgracia de la sociedad española, que tardará bastantes años en reparar los
destrozos que este personaje entre ridículo y patético ha provocado en su
riqueza material y en su consistencia ética. Cuando le confesó a su mujer
que había descubierto que era enorme el número de españoles que podían hacer
su trabajo, puso de relieve, aparte de su levedad mental, su irreversible
condición de irresponsable contumaz. De la misma forma que la sabiduría
consiste en la ampliación progresiva del ámbito de nuestra ignorancia, la
apreciación de que la función de cabeza del Consejo de Ministros está al
alcance de cualquiera sólo puede surgir de una de chorlito.
Un primer augurio sombrío de su entronización lo proporcionaron las trágicas
y oscuras circunstancias en las que tuvo lugar su inesperada victoria de
2004. Nadie, ni por supuesto él mismo pese a ocasionales baladronadas
inmaduras, pronosticaba un resultado favorable para el PSOE hace siete años.
Los dos mandatos de *Aznar *habían *saneado las arcas* públicas, *dinamizado
el sistema* productivo, *reducido la tasa de paro* hasta casi situarla en la
media comunitaria, posibilitado la *acogida *sin tensiones de *cuatro
millones de inmigrantes*, modernizado las infraestructuras y fortalecido el
prestigio de España en el mundo. Todavía era pronto para percibir los
peligros latentes en un modelo de crecimiento exuberante pero frágil y los
excesos del sector financiero global que incubaban una crisis pavorosa.
Nuestro país disfrutaba entonces satisfecho de una etapa de *prosperidad sin
precedentes* cuya prolongación se creía asegurada. Fue la *reacción
emocional ante una atrocidad sangrienta malignamente explotada por la
izquierda y mal gestionada por el PP *en términos de comunicación *la que de
repente colocó en La Moncloa a un perfecto inútil*. A partir de este suceso
aciago, y tras un arranque en el que se vivió de las rentas acumuladas
durante el periodo anterior, los estragos del diseño zapateril pronto fueron
visibles. *Su estrategia* ha consistido en *impulsar todo lo que pudiera
dividir, empobrecer, embrutecer, desprestigiar y debilitar a España a la vez
que impedir o sabotear las iniciativas o las medidas tendentes a unirla,
cohesionarla o abrirle oportunidades. La combinación letal de feminismo
radical, ecologismo barato, connivencia con el terrorismo, pacifismo
pusilánime, demonización del otro gran partido nacional, despilfarro
galopante, deterioro de la educación, fragmentación de la nación y
castración del Estado, ha sumido a nuestro país en la postración, la ruina,
la confusión y el desánimo. El regreso al anonimato del que nunca debió
salir del peor gobernante que hemos padecido en los últimos dos siglos
únicamente puede producir alivio. En esta hora feliz de escribir su
epitafio político, uno muy indicado sería: **“Nunca soñó subir tan alto,
nunca España imaginó caer tan bajo”.*
este personaje *
* *
*Aleix Vidal-Quadras*
La crónica de una muerte anunciada ha llegado a su fin. José Luis Rodríguez
Zapatero, el quinto presidente del Gobierno desde la Transición, ha mordido
el polvo y abrumado por su fracaso, ha anunciado que renuncia a presentar
por tercera vez su candidatura. Aunque a la luz de su trayectoria previa ya
podía adivinarse, sus ahora perfectamente conocidas capacidades personales
han dejado palpable que el exigente oficio al que fue promovido por la
voluntad mayoritaria de su partido primero y de los españoles después
rebasaba con mucho sus posibilidades de desempeñarlo con acierto.
Equipado con un *expediente académico mediocre*, sin obra escrita conocida,
*carente de cualquier experiencia* profesional o empresarial de cierto
calado, *deformado* por la escuela de la *conspiración de pasillos* en la
estructura burocrática de una organización política de provincias,
prácticamente *inédito como parlamentario*, sin otro *idioma* que el propio
y este manejado con lenta, pobre y torpe premiosidad, *vacío de bagaje
intelectual* más allá de los cuatro lugares comunes del progresismo barato,
*impregnado del rencor hacia todo lo que represente excelencia *típico de
los mediocres, *limitado por la mentalidad aldeana* del que nunca ha
realizado actividad alguna en el extranjero, *desprovisto de escrúpulos
morales*, *incapaz* de *evaluar las consecuencias de sus disparates* e *
ignorante* incluso de los rudimentos de economía que posee un ejecutivo
medio de una pequeña compañía, el inefable ZP se encontró un buen día
catapultado a la máxima responsabilidad ejecutiva de una de las mayores
naciones de Europa.
Este experimento absurdo estaba condenado al desastre y así ha sucedido para
desgracia de la sociedad española, que tardará bastantes años en reparar los
destrozos que este personaje entre ridículo y patético ha provocado en su
riqueza material y en su consistencia ética. Cuando le confesó a su mujer
que había descubierto que era enorme el número de españoles que podían hacer
su trabajo, puso de relieve, aparte de su levedad mental, su irreversible
condición de irresponsable contumaz. De la misma forma que la sabiduría
consiste en la ampliación progresiva del ámbito de nuestra ignorancia, la
apreciación de que la función de cabeza del Consejo de Ministros está al
alcance de cualquiera sólo puede surgir de una de chorlito.
Un primer augurio sombrío de su entronización lo proporcionaron las trágicas
y oscuras circunstancias en las que tuvo lugar su inesperada victoria de
2004. Nadie, ni por supuesto él mismo pese a ocasionales baladronadas
inmaduras, pronosticaba un resultado favorable para el PSOE hace siete años.
Los dos mandatos de *Aznar *habían *saneado las arcas* públicas, *dinamizado
el sistema* productivo, *reducido la tasa de paro* hasta casi situarla en la
media comunitaria, posibilitado la *acogida *sin tensiones de *cuatro
millones de inmigrantes*, modernizado las infraestructuras y fortalecido el
prestigio de España en el mundo. Todavía era pronto para percibir los
peligros latentes en un modelo de crecimiento exuberante pero frágil y los
excesos del sector financiero global que incubaban una crisis pavorosa.
Nuestro país disfrutaba entonces satisfecho de una etapa de *prosperidad sin
precedentes* cuya prolongación se creía asegurada. Fue la *reacción
emocional ante una atrocidad sangrienta malignamente explotada por la
izquierda y mal gestionada por el PP *en términos de comunicación *la que de
repente colocó en La Moncloa a un perfecto inútil*. A partir de este suceso
aciago, y tras un arranque en el que se vivió de las rentas acumuladas
durante el periodo anterior, los estragos del diseño zapateril pronto fueron
visibles. *Su estrategia* ha consistido en *impulsar todo lo que pudiera
dividir, empobrecer, embrutecer, desprestigiar y debilitar a España a la vez
que impedir o sabotear las iniciativas o las medidas tendentes a unirla,
cohesionarla o abrirle oportunidades. La combinación letal de feminismo
radical, ecologismo barato, connivencia con el terrorismo, pacifismo
pusilánime, demonización del otro gran partido nacional, despilfarro
galopante, deterioro de la educación, fragmentación de la nación y
castración del Estado, ha sumido a nuestro país en la postración, la ruina,
la confusión y el desánimo. El regreso al anonimato del que nunca debió
salir del peor gobernante que hemos padecido en los últimos dos siglos
únicamente puede producir alivio. En esta hora feliz de escribir su
epitafio político, uno muy indicado sería: **“Nunca soñó subir tan alto,
nunca España imaginó caer tan bajo”.*
miércoles, 27 de abril de 2011
Las Crisis nos Enseñan
Han transcurrido más de tres años desde el estallido de la crisis financiera global y las dudas sobre la recuperación económica todavía persisten. Pese a ello, los mercados recuperan paulatinamente el optimismo y, en este contexto, la Asociación Europea de Asesores y Planificadores Financieros (EFPA), desde su sede en España, ha lanzado un decálogo con las lecciones que deberíamos haber aprendido tras este periodo de recesión. Valorar los riesgos antes de endeudarse, entender el producto adquirido antes de proceder a su compra y no dejarse llevar por los productos de moda se configuran como tres de los pilares fundamentales con cabida en este listado.
El primer punto del decálogo se sustenta en una máxima contundente: "si no entiendo el producto, no lo compro"(1). De este modo, según especifica del documento, cada individuo debe tener constancia de dónde está invirtiendo su dinero antes de contratar. En declaraciones a Cotizalia, la directora de EFPA España, Andrea Carreras-Candi, señala la importancia que, en este sentido, cobra la educación financiera, ya que se configura como una de las actividades básicas para que el individuo se familiarice con el vocabulario técnico de las finanzas y valore los riesgos de cada operación.
Carreras-Candi asegura que, desde la institución, "apoyamos que el consumidor aumente su nivel de cultura financiera, un aspecto que debería fomentarse desde edad escolar", según apuntala. La directiva señala que "algunos de nuestros centros acreditados han participado en proyectos para formar a profesores de instituto" con el fin de establecer programas que permitan divulgar conocimientos financieros a los alumnos de centros de secundaria. Así, aunque la educación financiera es un objetivo que se ha establecido a largo plazo desde instancias gubernamentales, EFPA lo considera considera fundamental para capacitar al individuo, entre otras lides, respecto al segundo punto del decálogo: poder "valorar los riesgos antes de endeudarse"(2).
En relación a esta valoración de riesgos, la Asociación Europea de Asesores y Planificadores Financieros hace especial hincapié en el ámbito de la vivienda por ser uno de los grandes muros con los que se ha chocado en España. Andrea Carreras-Candi señala que "en épocas de euforia, todo el mundo se ha lanzado a comprar pisos" y esta situación ha elevado la exposición del individuo al endeudamiento, "lo que puede verse agravado por la fluctuación del tipo de interés", subraya la directiva. Partiendo de este pretexto, EFPA señala que, "si queremos comprar un piso, no es recomendable pedir una hipoteca que represente más del 15% de nuestros ingresos". Al mismo tiempo, añade un tercer punto al decálogo con el que 'inesperadamente' se han encontrado algunos inversores: "la vivienda, incluso en España, baja"(3).
Los siguientes puntos recogidos en las indicaciones enfatizan que "no hay que dejarse llevar por los productos de moda"(4) y que "la crisis también puede ser una oportunidad"(5). En relación a este quinto aspecto, Carreras-Candi especifica que "en épocas recesivas, hay oportunidades de compra a precios más bajos", por lo que es positivo "saber ver para captar productos del mercado a precios inferiores". La directora de EFPA España también recupera el sexto 'mandamiento' del listado, "mejor ser más hormiga y menos cigarra" (6), con el que la institución pretende reseñar que "es más importante ser ahorrador que malgastador" para equilibrar el consumo presente y futuro, sobre todo en lo que se refiere a la "interiorización de la jubilación".
El séptimo punto del decálogo prosigue con la importancia de discernir los conceptos financieros y señala que "no es lo mismo riesgo que volatilidad" (7), ya que quienes han invertido a largo plazo en los momentos de más volatilidad han tenido menor riesgo en sus inversiones que aquellos que lo han hecho a corto plazo. Asimismo, en octavo lugar, EFPA España asegura que "la diversificación funciona" (8). La directora de la institución, Andrea Carreras-Candi remarca lo importante que resulta buscar oportunidades en otros países y variar en el tipo de producto donde se invierte, "fomentando la diversificación en diversos activos".
La asesoría financiera intenta recuperar la confianza del sector
Entre los apartados concluyentes, el documento incide en que hay que "invertir con la cabeza, no con el corazón" (9), al tiempo que subraya que "planificar es de sabios" (10). En relación a este último apartado, el decálogo señala que "un asesor financiero cualificado y certificado nos ayudará en la planificación de nuestras finanzas personales". En referencia a este aspecto, Andrea Carreras-Candi asevera a Cotizalia que "la crisis ha puesto en evidencia la necesidad de recurrir a un buen asesor financiero" para operar dentro del sector.
La directora de EFPA incide en que el colectivo de asesores financieros "se ha visto afectado por la recesión, ya que se ha creado cierta desconfianza" en el torno a este perfil. Frente a esta situación, EFPA está luchando para ofrecer información continua a los profesionales del ámbito de la planificación y asesoría financiera, con el fin de garantizar un nivel de conocimientos óptimo para atender las necesidades del mercado.
El primer punto del decálogo se sustenta en una máxima contundente: "si no entiendo el producto, no lo compro"(1). De este modo, según especifica del documento, cada individuo debe tener constancia de dónde está invirtiendo su dinero antes de contratar. En declaraciones a Cotizalia, la directora de EFPA España, Andrea Carreras-Candi, señala la importancia que, en este sentido, cobra la educación financiera, ya que se configura como una de las actividades básicas para que el individuo se familiarice con el vocabulario técnico de las finanzas y valore los riesgos de cada operación.
Carreras-Candi asegura que, desde la institución, "apoyamos que el consumidor aumente su nivel de cultura financiera, un aspecto que debería fomentarse desde edad escolar", según apuntala. La directiva señala que "algunos de nuestros centros acreditados han participado en proyectos para formar a profesores de instituto" con el fin de establecer programas que permitan divulgar conocimientos financieros a los alumnos de centros de secundaria. Así, aunque la educación financiera es un objetivo que se ha establecido a largo plazo desde instancias gubernamentales, EFPA lo considera considera fundamental para capacitar al individuo, entre otras lides, respecto al segundo punto del decálogo: poder "valorar los riesgos antes de endeudarse"(2).
En relación a esta valoración de riesgos, la Asociación Europea de Asesores y Planificadores Financieros hace especial hincapié en el ámbito de la vivienda por ser uno de los grandes muros con los que se ha chocado en España. Andrea Carreras-Candi señala que "en épocas de euforia, todo el mundo se ha lanzado a comprar pisos" y esta situación ha elevado la exposición del individuo al endeudamiento, "lo que puede verse agravado por la fluctuación del tipo de interés", subraya la directiva. Partiendo de este pretexto, EFPA señala que, "si queremos comprar un piso, no es recomendable pedir una hipoteca que represente más del 15% de nuestros ingresos". Al mismo tiempo, añade un tercer punto al decálogo con el que 'inesperadamente' se han encontrado algunos inversores: "la vivienda, incluso en España, baja"(3).
Los siguientes puntos recogidos en las indicaciones enfatizan que "no hay que dejarse llevar por los productos de moda"(4) y que "la crisis también puede ser una oportunidad"(5). En relación a este quinto aspecto, Carreras-Candi especifica que "en épocas recesivas, hay oportunidades de compra a precios más bajos", por lo que es positivo "saber ver para captar productos del mercado a precios inferiores". La directora de EFPA España también recupera el sexto 'mandamiento' del listado, "mejor ser más hormiga y menos cigarra" (6), con el que la institución pretende reseñar que "es más importante ser ahorrador que malgastador" para equilibrar el consumo presente y futuro, sobre todo en lo que se refiere a la "interiorización de la jubilación".
El séptimo punto del decálogo prosigue con la importancia de discernir los conceptos financieros y señala que "no es lo mismo riesgo que volatilidad" (7), ya que quienes han invertido a largo plazo en los momentos de más volatilidad han tenido menor riesgo en sus inversiones que aquellos que lo han hecho a corto plazo. Asimismo, en octavo lugar, EFPA España asegura que "la diversificación funciona" (8). La directora de la institución, Andrea Carreras-Candi remarca lo importante que resulta buscar oportunidades en otros países y variar en el tipo de producto donde se invierte, "fomentando la diversificación en diversos activos".
La asesoría financiera intenta recuperar la confianza del sector
Entre los apartados concluyentes, el documento incide en que hay que "invertir con la cabeza, no con el corazón" (9), al tiempo que subraya que "planificar es de sabios" (10). En relación a este último apartado, el decálogo señala que "un asesor financiero cualificado y certificado nos ayudará en la planificación de nuestras finanzas personales". En referencia a este aspecto, Andrea Carreras-Candi asevera a Cotizalia que "la crisis ha puesto en evidencia la necesidad de recurrir a un buen asesor financiero" para operar dentro del sector.
La directora de EFPA incide en que el colectivo de asesores financieros "se ha visto afectado por la recesión, ya que se ha creado cierta desconfianza" en el torno a este perfil. Frente a esta situación, EFPA está luchando para ofrecer información continua a los profesionales del ámbito de la planificación y asesoría financiera, con el fin de garantizar un nivel de conocimientos óptimo para atender las necesidades del mercado.
viernes, 22 de abril de 2011
La quiebra de Grecia, Irlanda y Portugal
Goldman analiza el impacto de la quiebra de Grecia, Irlanda y Portugal en la banca europea. Estima unas pérdidas totales de 76.000 millones.
La caída de Grecia ya se da por descontada en los mercados. Este jueves, por ejemplo, la deuda helena alcanzaba un rendimiento del 22,795% y los CDS (seguros contra impago) llegaban a los 1.450 puntos básicos. Es un nivel que indica, simplemente, que no hay mercado para estos activos y que aquellos tenedores de bonos griegos que quieren deshacerse de ellos tienen, prácticamente, que regalarlos.
De esta manera, se anticipa una bancarrota que traerá como consecuencia principal que los acreedores no recibirán todo el dinero prometido. La cuestión ahora es saber cómo de grandes serán esas pérdidas. Goldman Sachs pubicó el miércoles un informe en el que analiza las posibles consecuencias de la quiebra, y avisa: el problema no es sólo la caída de Grecia, Irlanda o Portugal, sino el impacto que ésta tendría en la banca europea y, sobre todo, doméstica de estos países en caso de producirse una reestructuración (quita y espera) de deuda pública.
Reestructuración de Grecia
Los autores del informe dan por hecha la "reestructuración" de la deuda griega y, en concreto, estiman que tendrá lugar "probablemente en 2012", antes de que entre en vigor el nuevo Fondo de rescate europeo, previsto para 2013. De este modo, el Estado heleno ofrecerá a sus acreedores pagarles menos de lo que les debe. Goldman ha elaborado un escenario con quitas de entre el 20% y el 60% en los bonos soberanos para estimar las pérdidas potenciales que ello implicaría para los acreedores del Gobierno heleno (bancos extranjeros y, sobre todo, nacionales).
La exposición de la banca europea a la deuda pública de Grecia, Irlanda y Portugal (GIP) asciende a un total de 180.000 millones de euros: las entidades acumulan en sus balances bonos helenos por valor de 101.000 millones (el 56% del total), 39.000 millones en deuda portuguesa (22%) y otros 40.000 en bonos irlandeses (22%).
De este modo, si se aplicasen quitas de entre el 20% y el 60%, la quiebra de Grecia supondría unas pérdidas de entre 13.000 y 41.000 millones de euros, respectivamente, a la banca europea. Esto implicaría perder entre el 1% y el 3% de su core capital (Tier 1), un impacto relativamente "pequeño" si se toma como referencia el agregado total de la banca europea.
Sin embargo, de esos 101.000 millones de euros en bonos helenos, la mayor parte (60.200 millones, el 60%) está en manos de la banca griega. Así, Goldman advierte de que el sistema financiero nacional sufriría unas pérdidas de hasta 25.000 millones de euros en caso de que las quitas asciendan al 60%. Esta cuantía implica que la banca nacional perdería hasta el 80% de su core capital.
Así pues, "los bancos griegos requerirían una sustancial inyección de capital adicional para cubrir las pérdidas derivadas de una teórica reestructuración". Es decir, la caída de la ficha del Estado griego arrastrará, en un efecto dominó, también a sus bancos. Las entidades helenas más afectadas serían, por este orden, el NBG, ABG y Pireus; mientras que los bancos extranjeros más expuestos serían, a su vez, el HRE, BNP, Dexia y Commerzbank.
Quitas en Irlanda y Portugal
La cuestión es si el proceso se parará ahí o seguirá tirando fichas. Ni los acreedores irlandeses ni los portugueses estarán especialmente tranquilos. De hecho, la rentabilidad de sus bonos alcanzaba este jueves el 9.712% en el caso luso y del 10,502% en el celta. Por ello, Goldman, aunque señala que el riesgo es "menor", tampoco descarta la caída de ambos estados, de ahí que también analice el posible impacto que ello causaría en el sector financiero.
La banca europea acumula en sus balances 39.000 millones en deuda pública portuguesa y otros 40.000 en bonos irlandeses. Así, la reestructuración de ambos países provocaría unas pérdidas totales de entre 11.000 (quitas del 20%) y 35.000 millones de euros (quitas del 60%) al conjunto del sector financiero.
La deuda soberana de Irlanda y Portugal está mucho más repartida que en el caso griego. Así, los bancos irlandeses, más grandes que los griegos, acumulan en sus balances el 55% del papel celta (21.800 millones), mientras que en el caso de los portugueses tan sólo alcanza el 34% (13.400 millones). Si las quitas alcanzasen el 60%, la banca irlandesa perdería 11.400 millones (el 62% de su capital) y la lusa 5.400 millones (hasta el 27% de su core capital).
Impacto total
Así pues ¿qué pasaría si finalmente suspenden pagos Grecia, Irlanda y Portugal? La exposición total de la banca a los bonos públicos de estos tres países asciende a 180.000 millones. Con quitas de entre el 20% y el 60%, las pérdidas para las entidades europeas oscilarían entre un mínimo de 24.000 millones y un máximo de 76.000 millones de euros, según Goldman, entre el 2% y el 6% de su core capital: las pérdidas con la quiebra de Grecia alcanzarían un máximo de 41.000 millones, 19.000 en el caso irlandés y otros 16.000 en el caso portugués.
Los bancos griegos, alemanes e irlandeses serían, por este orden, los más afectados del continente, ya que su exposición a la deuda pública de estos tres países en riesgo asciende a 61.000 millones (34% del total), 43.000 ( 24%) y 22.000 (12%), respectivamente.
Exposición de la banca europea a Grecia, Irlanda y Portugal
La banca de Alemania, Francia y el Benelux acumulan unos 74.000 millones en bonos de Grecia, Irlanda y Portugal (el 41% del total), mientras que la exposición de la banca doméstica de los países en riesgo asciende a 98.200 millones (el 55% del total). La siguiente tabla muestra los bancos europeos más expuestos:
Los bancos más expuestos a Grecia, Irlanda y Portugal
Efectos secundarios
A nivel de impacto exterior, lo más preocupante radica en el sistema financiero alemán. Aunque los bancos germanos son mucho más grandes y tienen músculo financiero suficiente para soportar pérdidas importantes, su nivel de exposición a estos tres países no es tranquilizador. El sistema financiero alemán tiene títulos griegos, portugueses e irlandeses por valor de 43.000 millones de euros (el 24% del total emitido). Asimismo, a nivel interno, el impacto más fuerte sería para la banca griega e irlandesa.
Y todo ello, tan sólo teniendo en cuenta los efectos de primera ronda, es decir, las pérdidas directas que sufriría la banca europea en caso de que estos países suspendan pagos. Goldman no tiene en cuenta en su análisis los efectos secundarios de la reestructuración. Y es que, la quiebra del Estado arrastraría a la insolvencia a numerosos bancos y empresas de esos países, con los consiguientes efectos sobre la banca exterior. Así, tal y como avanzó Libre Mercado, la exposición total de la banca extranjera a Grecia, Irlanda y Portugal (créditos al sector público, bancario y empresarial) ronda el billón de euros.
La caída de Grecia ya se da por descontada en los mercados. Este jueves, por ejemplo, la deuda helena alcanzaba un rendimiento del 22,795% y los CDS (seguros contra impago) llegaban a los 1.450 puntos básicos. Es un nivel que indica, simplemente, que no hay mercado para estos activos y que aquellos tenedores de bonos griegos que quieren deshacerse de ellos tienen, prácticamente, que regalarlos.
De esta manera, se anticipa una bancarrota que traerá como consecuencia principal que los acreedores no recibirán todo el dinero prometido. La cuestión ahora es saber cómo de grandes serán esas pérdidas. Goldman Sachs pubicó el miércoles un informe en el que analiza las posibles consecuencias de la quiebra, y avisa: el problema no es sólo la caída de Grecia, Irlanda o Portugal, sino el impacto que ésta tendría en la banca europea y, sobre todo, doméstica de estos países en caso de producirse una reestructuración (quita y espera) de deuda pública.
Reestructuración de Grecia
Los autores del informe dan por hecha la "reestructuración" de la deuda griega y, en concreto, estiman que tendrá lugar "probablemente en 2012", antes de que entre en vigor el nuevo Fondo de rescate europeo, previsto para 2013. De este modo, el Estado heleno ofrecerá a sus acreedores pagarles menos de lo que les debe. Goldman ha elaborado un escenario con quitas de entre el 20% y el 60% en los bonos soberanos para estimar las pérdidas potenciales que ello implicaría para los acreedores del Gobierno heleno (bancos extranjeros y, sobre todo, nacionales).
La exposición de la banca europea a la deuda pública de Grecia, Irlanda y Portugal (GIP) asciende a un total de 180.000 millones de euros: las entidades acumulan en sus balances bonos helenos por valor de 101.000 millones (el 56% del total), 39.000 millones en deuda portuguesa (22%) y otros 40.000 en bonos irlandeses (22%).
De este modo, si se aplicasen quitas de entre el 20% y el 60%, la quiebra de Grecia supondría unas pérdidas de entre 13.000 y 41.000 millones de euros, respectivamente, a la banca europea. Esto implicaría perder entre el 1% y el 3% de su core capital (Tier 1), un impacto relativamente "pequeño" si se toma como referencia el agregado total de la banca europea.
Sin embargo, de esos 101.000 millones de euros en bonos helenos, la mayor parte (60.200 millones, el 60%) está en manos de la banca griega. Así, Goldman advierte de que el sistema financiero nacional sufriría unas pérdidas de hasta 25.000 millones de euros en caso de que las quitas asciendan al 60%. Esta cuantía implica que la banca nacional perdería hasta el 80% de su core capital.
Así pues, "los bancos griegos requerirían una sustancial inyección de capital adicional para cubrir las pérdidas derivadas de una teórica reestructuración". Es decir, la caída de la ficha del Estado griego arrastrará, en un efecto dominó, también a sus bancos. Las entidades helenas más afectadas serían, por este orden, el NBG, ABG y Pireus; mientras que los bancos extranjeros más expuestos serían, a su vez, el HRE, BNP, Dexia y Commerzbank.
Quitas en Irlanda y Portugal
La cuestión es si el proceso se parará ahí o seguirá tirando fichas. Ni los acreedores irlandeses ni los portugueses estarán especialmente tranquilos. De hecho, la rentabilidad de sus bonos alcanzaba este jueves el 9.712% en el caso luso y del 10,502% en el celta. Por ello, Goldman, aunque señala que el riesgo es "menor", tampoco descarta la caída de ambos estados, de ahí que también analice el posible impacto que ello causaría en el sector financiero.
La banca europea acumula en sus balances 39.000 millones en deuda pública portuguesa y otros 40.000 en bonos irlandeses. Así, la reestructuración de ambos países provocaría unas pérdidas totales de entre 11.000 (quitas del 20%) y 35.000 millones de euros (quitas del 60%) al conjunto del sector financiero.
La deuda soberana de Irlanda y Portugal está mucho más repartida que en el caso griego. Así, los bancos irlandeses, más grandes que los griegos, acumulan en sus balances el 55% del papel celta (21.800 millones), mientras que en el caso de los portugueses tan sólo alcanza el 34% (13.400 millones). Si las quitas alcanzasen el 60%, la banca irlandesa perdería 11.400 millones (el 62% de su capital) y la lusa 5.400 millones (hasta el 27% de su core capital).
Impacto total
Así pues ¿qué pasaría si finalmente suspenden pagos Grecia, Irlanda y Portugal? La exposición total de la banca a los bonos públicos de estos tres países asciende a 180.000 millones. Con quitas de entre el 20% y el 60%, las pérdidas para las entidades europeas oscilarían entre un mínimo de 24.000 millones y un máximo de 76.000 millones de euros, según Goldman, entre el 2% y el 6% de su core capital: las pérdidas con la quiebra de Grecia alcanzarían un máximo de 41.000 millones, 19.000 en el caso irlandés y otros 16.000 en el caso portugués.
Los bancos griegos, alemanes e irlandeses serían, por este orden, los más afectados del continente, ya que su exposición a la deuda pública de estos tres países en riesgo asciende a 61.000 millones (34% del total), 43.000 ( 24%) y 22.000 (12%), respectivamente.
Exposición de la banca europea a Grecia, Irlanda y Portugal
La banca de Alemania, Francia y el Benelux acumulan unos 74.000 millones en bonos de Grecia, Irlanda y Portugal (el 41% del total), mientras que la exposición de la banca doméstica de los países en riesgo asciende a 98.200 millones (el 55% del total). La siguiente tabla muestra los bancos europeos más expuestos:
Los bancos más expuestos a Grecia, Irlanda y Portugal
Efectos secundarios
A nivel de impacto exterior, lo más preocupante radica en el sistema financiero alemán. Aunque los bancos germanos son mucho más grandes y tienen músculo financiero suficiente para soportar pérdidas importantes, su nivel de exposición a estos tres países no es tranquilizador. El sistema financiero alemán tiene títulos griegos, portugueses e irlandeses por valor de 43.000 millones de euros (el 24% del total emitido). Asimismo, a nivel interno, el impacto más fuerte sería para la banca griega e irlandesa.
Y todo ello, tan sólo teniendo en cuenta los efectos de primera ronda, es decir, las pérdidas directas que sufriría la banca europea en caso de que estos países suspendan pagos. Goldman no tiene en cuenta en su análisis los efectos secundarios de la reestructuración. Y es que, la quiebra del Estado arrastraría a la insolvencia a numerosos bancos y empresas de esos países, con los consiguientes efectos sobre la banca exterior. Así, tal y como avanzó Libre Mercado, la exposición total de la banca extranjera a Grecia, Irlanda y Portugal (créditos al sector público, bancario y empresarial) ronda el billón de euros.
martes, 19 de abril de 2011
Un Grupo de Dubai compra Club Español: 20 de abril
Un grupo de Dubai confirma que comprará un club de fútbol español
Royal Emirates Group, una empresa de Dubai, anunciará hoy la compra de un club de fútbol español. La 'arabización' del fútbol español.
"Confirmamos que la compañía comprará un equipo español", ha reconocido a Reuters Suleiman al Butti, gestor de proyectos de Royal Emirates Group, sin identificar el nombre del club. Los principales problemas de la operación.
Royal Emirates Group es un fondo de inversión presidido por el jeque Butti Bin Suhail Al Maktoum, que ante la que considera inminente operación ha asegurado que se convertirá "en el propietario de uno de los principales equipos de fútbol de 'primera' de La Liga española".
Algunos medios de comunicación señalaban en febrero que un fondo soberano de Dubai estaba interesado en la compra del Real Zaragoza, que en estos momentos es el principal candidato a ser objeto de esta adquisición.
Además, se ha hablado sobre la posibilidad de cambiar el nombre del equipo comprado por 'Team Dubai', algo que ha levantado polémica de forma inmediata en las redes sociales.
Otro de los equipos que suenan para la posible operación es el Getafe. Fuentes cercanas a elEconomista.es aseguran que Ángel Torres ha viajado a Emiratos Árabes Unidos, pero únicamente para buscar patrocinadores, nunca para una venta del club.
De este modo seguiría creciendo la presencia del capital del mundo árabe en el fútbol español, después de la llegada del jeque Al Thani al Málaga y del indio Ali Syed al Racing de Santander.
En otros países, esto es más habitual. Por ejemplo, en el fútbol inglés, entre Premier League y Championship (Primera y Segunda división), hasta un total de nueve clubes tienen capital de estos países.
La LFP niega las informaciones
Fuentes cercanas a la Liga de Fútbol Profesional (LFP) han negado a elEconomista.es que exista ninguna noticia "ni de forma oficial ni oficiosa" acerca de esta compra de un club por parte del grupo dubaití.
Además, han recalcado la imposibilidad, especialmente del cambio de nombre sobre el que se ha especulado. "Es algo utópico, terminantemente prohibido por la UEFA y la Liga". "Sería tan difícil como cambiar el nombre de un equipo a King Africa" han afirmado textualmente.
En caso de confirmarse el interés del grupo dubaití, la LFP ha asegurado que en caso de superar la compra el 5% de las acciones del club, tendría que ser comunicada al Consejo Superior de Deportes, y si sobrepasase el 25%, también a la propia Liga de Fútbol Profesional. Ambas entidades deberían dar su visto bueno a la operación, una vez cotejado que no existe ninguna incompatibilidad con la propiedad de otra entidad deportiva.
Royal Emirates Group, una empresa de Dubai, anunciará hoy la compra de un club de fútbol español. La 'arabización' del fútbol español.
"Confirmamos que la compañía comprará un equipo español", ha reconocido a Reuters Suleiman al Butti, gestor de proyectos de Royal Emirates Group, sin identificar el nombre del club. Los principales problemas de la operación.
Royal Emirates Group es un fondo de inversión presidido por el jeque Butti Bin Suhail Al Maktoum, que ante la que considera inminente operación ha asegurado que se convertirá "en el propietario de uno de los principales equipos de fútbol de 'primera' de La Liga española".
Algunos medios de comunicación señalaban en febrero que un fondo soberano de Dubai estaba interesado en la compra del Real Zaragoza, que en estos momentos es el principal candidato a ser objeto de esta adquisición.
Además, se ha hablado sobre la posibilidad de cambiar el nombre del equipo comprado por 'Team Dubai', algo que ha levantado polémica de forma inmediata en las redes sociales.
Otro de los equipos que suenan para la posible operación es el Getafe. Fuentes cercanas a elEconomista.es aseguran que Ángel Torres ha viajado a Emiratos Árabes Unidos, pero únicamente para buscar patrocinadores, nunca para una venta del club.
De este modo seguiría creciendo la presencia del capital del mundo árabe en el fútbol español, después de la llegada del jeque Al Thani al Málaga y del indio Ali Syed al Racing de Santander.
En otros países, esto es más habitual. Por ejemplo, en el fútbol inglés, entre Premier League y Championship (Primera y Segunda división), hasta un total de nueve clubes tienen capital de estos países.
La LFP niega las informaciones
Fuentes cercanas a la Liga de Fútbol Profesional (LFP) han negado a elEconomista.es que exista ninguna noticia "ni de forma oficial ni oficiosa" acerca de esta compra de un club por parte del grupo dubaití.
Además, han recalcado la imposibilidad, especialmente del cambio de nombre sobre el que se ha especulado. "Es algo utópico, terminantemente prohibido por la UEFA y la Liga". "Sería tan difícil como cambiar el nombre de un equipo a King Africa" han afirmado textualmente.
En caso de confirmarse el interés del grupo dubaití, la LFP ha asegurado que en caso de superar la compra el 5% de las acciones del club, tendría que ser comunicada al Consejo Superior de Deportes, y si sobrepasase el 25%, también a la propia Liga de Fútbol Profesional. Ambas entidades deberían dar su visto bueno a la operación, una vez cotejado que no existe ninguna incompatibilidad con la propiedad de otra entidad deportiva.
Los Americanos Interesados en Las Cajas
El foro financiero francés, Paris Europlace, convocó ayer en la New York Stock Exchange una mesa redonda para hacer repaso a las perspectivas económicas del Viejo Continente y, en especial, las oportunidades de negocio que pueden surgir en la Eurozona. Por supuesto, nuestro país, salió a relucir en numerosas ocasiones pero llamó la atención la defensa que realizó Franck Petitgas, co-director global de banca de inversión de Morgan Stanley, una de las vacas sagradas del sector financiero de EEUU.
"Creo que Moody's está muy equivocado", dijo en referencia a los 50.000 millones de euros que la agencia de calificación asegura que necesitan las cajas en materia de capital. Desde su punto de vista, "muchos inversores estadounidenses están interesados en las cajas", mientras señaló a los múltiples hedge funds que ya han demostrado su atractivo por algunas de las cajas de ahorro de nuestro país.
"Los inversores de EEUU están jugando un papel activo en la actividad de compras y fusiones (M&A) en la Unión Europea, piensan que su divisa es estable y es una zona segura de inversión", explicó.
En lo que se refiere al sector corporativo y empresarial europeo, Petitgas dijo que su salud "es similar a la de EEUU" puesto que existe consolidación y mucha liquidez algo que se demuestra en la actividad de M&A que al igual que a este lado del Atlántico se produce en efectivo y no a través de intercambio de acciones.
Alemania se beneficia de los periféricos
Para el co-director global de banca de inversión de Morgan Stanley, la diferencia entre Alemania y los países periféricos no es un "cuento de dos ciudades completamente distinta". "Alemania se beneficia de los periféricos y éstos de la fortaleza germana", indicó mientras explicó que si Alemania no hubiera pertenecido a la Eurozona "el marco sería mucho más fuerte" y los tipos de interés a estas alturas del ciclo económico "mucho más altas".
En referencia a la subida de un cuarto de punto en los tipos llevada a cabo por el Banco Central Europeo, el directivo de Morgan Stanley no tardó en reconocer que los mercados financieros "lo han entendido" puesto que demuestra que "Europa está trabajando de forma conjunta, como un colectivo", aunque comprendió que algunos contribuyentes tengan dudas sobre las acciones llevadas a cabo por Jean Claude Trichet.
Al hablar del sector bancario europeo y de la crisis de deuda soberana en la UE Petitgas aclaró que las medidas llevadas a cabo por los distintos gobiernos, su nivel de convicción y sus distintos programas institucionales "han cambiado la perspectiva de los mercados financieros".
Además, señaló que los bancos europeos "ya han recapitalizado un total de 20.000 millones de euros" y, seguramente, "recapitalizarán otros 20.000 millones de euros más". Con estas cifras sobre la mesa, el co-director global de banca de inversión de Morgan Stanley dijo que este nivel es muy similar al alcanzado por la banca de EEUU tras la crisis y, por eso, "los mercados han reconocido dicho esfuerzo".
"Creo que Moody's está muy equivocado", dijo en referencia a los 50.000 millones de euros que la agencia de calificación asegura que necesitan las cajas en materia de capital. Desde su punto de vista, "muchos inversores estadounidenses están interesados en las cajas", mientras señaló a los múltiples hedge funds que ya han demostrado su atractivo por algunas de las cajas de ahorro de nuestro país.
"Los inversores de EEUU están jugando un papel activo en la actividad de compras y fusiones (M&A) en la Unión Europea, piensan que su divisa es estable y es una zona segura de inversión", explicó.
En lo que se refiere al sector corporativo y empresarial europeo, Petitgas dijo que su salud "es similar a la de EEUU" puesto que existe consolidación y mucha liquidez algo que se demuestra en la actividad de M&A que al igual que a este lado del Atlántico se produce en efectivo y no a través de intercambio de acciones.
Alemania se beneficia de los periféricos
Para el co-director global de banca de inversión de Morgan Stanley, la diferencia entre Alemania y los países periféricos no es un "cuento de dos ciudades completamente distinta". "Alemania se beneficia de los periféricos y éstos de la fortaleza germana", indicó mientras explicó que si Alemania no hubiera pertenecido a la Eurozona "el marco sería mucho más fuerte" y los tipos de interés a estas alturas del ciclo económico "mucho más altas".
En referencia a la subida de un cuarto de punto en los tipos llevada a cabo por el Banco Central Europeo, el directivo de Morgan Stanley no tardó en reconocer que los mercados financieros "lo han entendido" puesto que demuestra que "Europa está trabajando de forma conjunta, como un colectivo", aunque comprendió que algunos contribuyentes tengan dudas sobre las acciones llevadas a cabo por Jean Claude Trichet.
Al hablar del sector bancario europeo y de la crisis de deuda soberana en la UE Petitgas aclaró que las medidas llevadas a cabo por los distintos gobiernos, su nivel de convicción y sus distintos programas institucionales "han cambiado la perspectiva de los mercados financieros".
Además, señaló que los bancos europeos "ya han recapitalizado un total de 20.000 millones de euros" y, seguramente, "recapitalizarán otros 20.000 millones de euros más". Con estas cifras sobre la mesa, el co-director global de banca de inversión de Morgan Stanley dijo que este nivel es muy similar al alcanzado por la banca de EEUU tras la crisis y, por eso, "los mercados han reconocido dicho esfuerzo".
domingo, 17 de abril de 2011
Reflotar el TITANIC
Invitados de lujo para el programa Debates en Libertad del pasado sábado. Alberto Recarte, presidente de Libertad Digital, Pedro Schwartz, catedrático y el periodista John Müller analizaron en los estudios de LDTV bajo la batuta de Javier Somalo las reformas que necesita abordar España con urgencia para terminar en una situación como la de Grecia o Portugal, que más que de rescate financiero puede convertirse directamente en la restructuración de la deuda pública.
Así, a lo largo del programa, los tres expertos desgranaron los puntos fuertes y débiles de nuestra economía y los pasos que debe dar si quiere evitar el desastre. En este punto, Recarte no descartaba la opción de la banca pública, es decir la nacionalización del sistema de cajas, pero sujeto a un corto periodo de tiempo.
Una de las claves es el sistema financiero que no termina de reestructurarse, pese a que el Gobierno insiste en que la reforma ya está abordada. Otra, el mercado de trabajo. "Un 20% de paro puede arrastrarnos a todos a una situación como la de Grecia y Portugal" que están cerca de la suspensión de pagos, advertía Recarte.
Los tres analistas se mostraron, en cualquier caso, pesimistas sobre la situación de nuestro país y las perspectivas de mejoría ya que ninguno confiaba demasiado en que nuestros políticos se atrevan a abordar las reformas necesarias en su conjunto. De no hacerlo, insistía Recarte, el deterioro de nuestra economía se acentuará y "hay un momento en que las cosas se tienen que romper".
Así, a lo largo del programa, los tres expertos desgranaron los puntos fuertes y débiles de nuestra economía y los pasos que debe dar si quiere evitar el desastre. En este punto, Recarte no descartaba la opción de la banca pública, es decir la nacionalización del sistema de cajas, pero sujeto a un corto periodo de tiempo.
Una de las claves es el sistema financiero que no termina de reestructurarse, pese a que el Gobierno insiste en que la reforma ya está abordada. Otra, el mercado de trabajo. "Un 20% de paro puede arrastrarnos a todos a una situación como la de Grecia y Portugal" que están cerca de la suspensión de pagos, advertía Recarte.
Los tres analistas se mostraron, en cualquier caso, pesimistas sobre la situación de nuestro país y las perspectivas de mejoría ya que ninguno confiaba demasiado en que nuestros políticos se atrevan a abordar las reformas necesarias en su conjunto. De no hacerlo, insistía Recarte, el deterioro de nuestra economía se acentuará y "hay un momento en que las cosas se tienen que romper".
La Clave es la Ejecución
Al tomar el camino del emprendedor, la mayoría nos obsesionamos con elegir la idea correcta, lo cual es un error.
Hay ideas que importan. Cuando uno ha hecho un descubrimiento científico, como crear una aleación de acero y plástico, la idea importa.
Pero sorprendentemente, lo que ocurre realmente en la mayoría de empresas de nueva creación es que los fundadores empiezan con una idea, llegan al borde de la quiebra y entonces modifican parte de la idea (lo que elocuentemente hoy día se ha dado en llamar “pivotar”) y vuelven al borde de la quiebra otra vez, vuelven a hacer una modificación y finalmente dan con algo que funciona.
Por eso la calidad personal más importante para llegar a ser un emprendedor de éxito es ser creativo y estar dispuesto a cambiar de dirección rápidamente.
Por ejemplo, cuando los investigadores en una planta del hospital de Swansea, Inglaterra, llevaban a cabo experimentos con citrato de sildenafil para tratar un tipo de dolor de tórax, descubrieron que no ayudaba mucho. Pero una enfermera espabilada (y probablemente colorada) dijo que muchos pacientes tenían “una tienda de campaña". Bajo su nombre comercial más reconocido, el compuesto se convirtió en un éxito multimillonario: Viagra.
Mi propio negocio empezó como una especie de fábrica para producir con celeridad empresas basadas en ideas que me gustaban. Pero no éramos lo bastante listos como para convertir esas ideas en empresas exitosas. En tanto, habíamos construido unas instalaciones de oficinas amplias y preciosas. Empezamos a alquilar las oficinas a otras empresas de nueva creación. Muy pronto nos dimos cuenta de que alquilar oficinas a empresas de nueva creación era un buen negocio. A las empresas de nueva creación les encanta estar rodeadas de sus semejantes. Hoy gestionamos el “hotel de empresas de nueva creación” más grande del mundo.
La mayoría de las empresas acaba haciendo algo diferente de lo que se propuso inicialmente. Mi consejo: elegir una buena “idea inicial” (una idea buena, atractiva, que os de a ti y a tus colaboradores algo con lo que empezar) y después experimentar como locos. Probad algo. Si no funciona, cambiadlo y probad de nuevo. Perfeccionad la idea poco a poco hasta que encontréis un concepto muy demandado en el mercado y que sea rentable. Así se han construido muchos grandes negocios.
Hay ideas que importan. Cuando uno ha hecho un descubrimiento científico, como crear una aleación de acero y plástico, la idea importa.
Pero sorprendentemente, lo que ocurre realmente en la mayoría de empresas de nueva creación es que los fundadores empiezan con una idea, llegan al borde de la quiebra y entonces modifican parte de la idea (lo que elocuentemente hoy día se ha dado en llamar “pivotar”) y vuelven al borde de la quiebra otra vez, vuelven a hacer una modificación y finalmente dan con algo que funciona.
Por eso la calidad personal más importante para llegar a ser un emprendedor de éxito es ser creativo y estar dispuesto a cambiar de dirección rápidamente.
Por ejemplo, cuando los investigadores en una planta del hospital de Swansea, Inglaterra, llevaban a cabo experimentos con citrato de sildenafil para tratar un tipo de dolor de tórax, descubrieron que no ayudaba mucho. Pero una enfermera espabilada (y probablemente colorada) dijo que muchos pacientes tenían “una tienda de campaña". Bajo su nombre comercial más reconocido, el compuesto se convirtió en un éxito multimillonario: Viagra.
Mi propio negocio empezó como una especie de fábrica para producir con celeridad empresas basadas en ideas que me gustaban. Pero no éramos lo bastante listos como para convertir esas ideas en empresas exitosas. En tanto, habíamos construido unas instalaciones de oficinas amplias y preciosas. Empezamos a alquilar las oficinas a otras empresas de nueva creación. Muy pronto nos dimos cuenta de que alquilar oficinas a empresas de nueva creación era un buen negocio. A las empresas de nueva creación les encanta estar rodeadas de sus semejantes. Hoy gestionamos el “hotel de empresas de nueva creación” más grande del mundo.
La mayoría de las empresas acaba haciendo algo diferente de lo que se propuso inicialmente. Mi consejo: elegir una buena “idea inicial” (una idea buena, atractiva, que os de a ti y a tus colaboradores algo con lo que empezar) y después experimentar como locos. Probad algo. Si no funciona, cambiadlo y probad de nuevo. Perfeccionad la idea poco a poco hasta que encontréis un concepto muy demandado en el mercado y que sea rentable. Así se han construido muchos grandes negocios.
Nada Más que una Sonrisa
Reproducimos a continuación un extracto de la introducción del libro 'La sonrisa de Julia Roberts' (editorial Chronica), escrito por José Antonio Zarzalejos (El Confidencial) y que saldrá a la venta el próximo lunes 18 de abril. Un ensayo donde uno de los más finos periodistas políticos españoles realiza un clarividente y certero análisis sobre uno de los periodos más turbulentos y complejos de la historia reciente de España.
Cuando el lector se adentre en las páginas de este libro entenderá cabalmente el sentido de su título. Porque todo el patrimonio biográfico de José Luis Rodríguez Zapatero cuando llegó a la presidencia del Gobierno tras las elecciones del 14 de marzo de 2004 podía resumirse en una sonrisa. Era entonces un hombre sin biografía, sin trayectoria, sin un bagaje de cierta relevancia. Liofilizado en dos siglas eufónicas -ZP-, el presidente era el representante de una generación socialista ideológicamente vaciada que había sustituido la doctrina izquierdista tradicional por la evanescencia del llamado progresismo. La dirección de España quedaba así en manos de un joven diputado socialista que había ocupado la bancada del PSOE en el Congreso desde 1986 sin que nadie advirtiera su presencia, catapultado al escaño desde León en donde había mostrado buenas dotes de manejo de las interioridades provinciales del partido y muy escasas tanto en la abogacía como en la docencia universitaria. Nadie conocía de él cosa alguna destacable o notable. Un grupo de compañeros que se agavillaron en torno a la denominación de Nueva Vía decidió, casi como una apuesta jocosa, lanzar a este vallisoletano recriado en tierras leonesas a competir en el 2000 con el buda socialista José Bono. Logró hacerse con la secretaria general del partido, apenas con nueve votos de diferencia, por exclusión -los delegados votaron contra los otros candidatos más que a favor de Rodríguez Zapatero- en un momento desolador para el PSOE, después de una travesía del desierto, comandados por el frustrado Almunia y el frustrante Borrell. Eligieron con los ojos cerrados, como quien lanza los dados agitando el cubilete. Saliese lo que saliese de la jugada no sería peor de lo que entonces concernía al socialismo español oscurecido por el nuevo conservatismo español que José María Aznar había guiado al poder, y disfrutándolo, con una contundencia histórica.
La página en blanco que Rodríguez Zapatero representaba reclamaba a gritos un relato, una construcción verbal coherente del quién y del para qué ese líder en esos momentos del inicio de la centuria. Y así fue como nació el andamiaje progresista en el que hasta 2008 se sostuvo la arquitectura efímera de ZP que consistió en la atribución al personaje de una serie de connotaciones progresistas que sustituían la encarnadura ideológica de una izquierda que se había quedado desde hacía ya mucho tiempo sin referentes sólidos. La generación de líderes, desde Reagan hasta Juan Pablo II, que desde troneras liberal-conservadoras, bien surtidos de claros principios de ética cívica, consiguieron cerrar la guerra fría con la caída del Muro de Berlín y provocado con ello la sepultura del socialismo real y un profundo desconcierto en la izquierda europea, sólo permitió después la emergencia de una generación ideológicamente ligera de laboristas como Tony Blair en Gran Bretaña o de socialdemócratas en Alemania como Gerhard Schröder.
En España las condiciones socio-políticas y económicas no indicaban la conclusión del ciclo conservador protagonizado desde 1996 por el Partido Popular. De no mediar la convulsión de los atentados terroristas del 11 de marzo de 2004, su gestión inadecuada por el Gobierno de Aznar y la agitación intimidante de la izquierda el día de reflexión -13 de marzo de 2004- previo a la cita con las urnas, es más que probable que los comicios los hubiera ganado Mariano Rajoy. No obstante, los dos últimos años de la segunda legislatura de Aznar, cuando ya se acercaba el plazo por él marcado para abandonar la presidencia y la candidatura a la misma por su formación política, las posibilidades de que el PP repitiese mayoría absoluta era más que inciertas días antes de los crímenes del 11-M. El sucesor de José María Aznar estaba llamado a recibir el castigo electoral que la sociedad deparaba al PP por su distanciamiento de la opinión pública nacional a propósito de la guerra de Irak y el despliegue poco púdico de algunos comportamientos incoherentes con el marchamo riguroso y sobrio que el mismo Aznar se había encargado de propugnar de forma reiterada. Rajoy pudo obtener -de no mediar la tragedia y su manejo torpe desde la Moncloa- una mayoría simple suficiente para gobernar a través de acuerdos con los grupos nacionalistas como hiciera su predecesor en 1996. De ahí que se haya afirmado con propiedad -es decir, con rigor- que Rodríguez Zapatero y el PSOE se encontraron con el poder como resultado de una concatenación de circunstancias en las que drama y torpeza se fundieron en unas jornadas trágicamente inolvidables.
Rodríguez Zapatero y el PSOE obtuvieron el poder democráticamente por más que pueda reprocharse de manera permanente la agitación y propaganda que con la peor factura del izquierdismo agreste se adueñó de la víspera electoral
Sin embargo, pese a los intentos de deslegitimación que menudearon -siendo la más grave la versión conspiratoria de la llamada autoría intelectual de los atentados terroristas del 11-M- lo cierto es que Rodríguez Zapatero y el PSOE obtuvieron el poder democráticamente por más que pueda reprocharse de manera permanente la agitación y propaganda que con la peor factura del izquierdismo agreste se adueñó de la víspera electoral. Pero aun contando que con semejante e intimidante movilización pudiera haber tenido alguna incidencia en la victoria socialista, nadie está autorizado a deslegitimarla en la medida en que por parte del Gobierno popular se produjo, simétricamente, una renuencia insalvable a la rectificación de sus iniciales versiones sobre la autoría de los atentados que se entendió en amplios sectores del electorado como un propósito doloso de engaño o simulación ventajista.
La historia se asume pero no puede alterarse y Rodríguez Zapatero ha debido convivir con esa merma de normalidad en su elección -no faltan quienes se refieren a él como el presidente por accidente- que no dejará de acompañarle cuando desaloje la Moncloa. Y esas circunstancias tan especiales son donde cuaja inicialmente el relato de Rodríguez Zapatero como un progresista de nuevo cuño que es intitulado buenista, pugnaz valedor de un nuevo talante para abordar los asuntos públicos, militante en un optimismo antropológico que le haría contemplar los problemas, por complicados que fuesen, como dificultades sorteable o superables y decidido partidario del dialoguismo. La forma de ser de izquierdas, de practicar políticas socialistas, de diferenciarse de la derecha social y política, no consistía ya en la puesta en práctica de grandes políticas alternativas en lo económico, sino en procurar un cambio en el esquema de valores sociales desde la acción del Gobierno. Rodríguez Zapatero y sus compañeros de Nueva Vía nunca se han sentido sucesores, herederos, ni siquiera legatarios, de los valores que acuñó la Transición a la democracia; tampoco de las voluntades -prácticamente testamentarias- del llamado felipismo y carecen de memoria histórica inmediata, optando, muy por el contrario por la mediata para revertir las condiciones en las que se produjo el tránsito de la dictadura a la libertad. Desde ese punto de vista, con pocas ideas políticas y mucho efectismo connotativo en sus discursos y actitudes, el llamado zapaterismo ha sido y se ha comportado como un instrumento de subversión del status alcanzado en el sistema español hasta 2004. Una subversión que, al serlo es revisionista, aliñada en conceptos inasibles, de contenido indeterminado que, sin embargo, pronto comenzaron a sistematizarse en su capacidad depredadora de lo estatuido.
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero (Reuters).
A Rodríguez Zapatero -como a las mujeres felices- le favorecía que careciese de historia, de antecedentes, de referencias vitales que lo acotasen, que le procurasen alguna forma de previsibilidad en sus acciones y omisiones. Con el presidente socialista cualquier decisión era posible: desde la precipitada e insolidaria -internacionalmente incorrecta- retirada de las tropas españolas de Irak cuando allí permanecían en condiciones durísimas las estadounidenses, británicas y de los demás países de la coalición, hasta la activación de artefactos sociales tan impactantes como la ideológica de género -matrimonio homosexual-, o la reformulación, no sólo de la Transición, sino de la forma de concordia nacional mediante la construcción ad hoc de la llamada memoria histórica o el mendaz e incompetente “proceso de paz” con la banda terrorista ETA. Y en el ámbito de las relaciones internacionales, la Alianza de las Civilizaciones. Todo ello venía justificado en las declaradas “ansias infinitas de paz” proclamadas por el presidente del Gobierno abrazado a un extraño concepto igualitarista -que no de igualdad- practicado mediante el basto procedimiento de la implantación de la cuota.
El hombre sin biografía se transformó un 12 de mayo de 2009, desde el escenario, patéticamente, de la tribuna de oradores del Congreso de los Diputados, en su holograma invertido, es decir, en una imagen opuesta, de espaldas a sí mismo, de lo que fue
Este acúmulo de progresismos -explicados siempre desde un pío entendimiento de la política como espacio de justicia—se dio en llamar con acierto buenismo. Nadie lo definió mejor que Valentí Puig para el que el buenismo se caracteriza porque “se desentiende del conflicto”, porque “lo nivela todo, todo merece la misma compasión, el mismo sentimiento, todo preocupa e inquieta”. Para el escritor mallorquín “el buenismo, al desactivar la necesidad de la política, articula toda una estrategia de amortiguación, escape o dilación.” Pero el buenismo es sólo el origen de otros comportamientos que se adhieren a él formando un corpus de acción política meramente declarativa y subversiva de lo establecido. El talante, como bien dice Puig, no es un método sino “un estar, y no una forma de ser” careciendo por tanto de autenticidad. El dialoguismo es también corolario del buenismo, y siguiendo a nuestro autor, remite a la idea de un dirigente “sin aristas, de concepciones flotantes, obligado a imprecisar sus criterios en razón de alianzas parlamentarias y llevado a su extremo la concepción “dialoguista” tiene algo de relativismo, un contravalor que se atrinchera en el pensamiento débil (…) dado que la noción de autoridad es negativa, la única autoridad posible es el diálogo”.
Para Puig “como paradigma buenista, el talante de José Luis Rodríguez Zapatero viene a combinar esa dimensión de ilusiones redescubiertas -algo así como el adanismo- con un aspecto no del todo definido y que provisionalmente podríamos etiquetar como proteccionismo moral, un proteccionismo “light”, llevadero pero cada vez más presente.”
¿Cuáles son las consecuencias -han sido- del buenismo? Siguiendo a Valentí Puig, evidentes: la consolidación de una sociedad civilmente inmadura con seria erosión de su capacidad de iniciativa al edulcorar sistemáticamente su entorno y sus fallas. El buenismo, en definitiva, “conlleva un incremento de la entrega del ciudadano al Estado, como combinación de inercias y confianzas sin contrastar. Si todo el mundo es bueno, el mal desaparece”. Para otro autor -Miquel Porta- el buenismo es “una ideología sustitutoria “post-Muro” que viene a ocupar el vacío dejado por viejas concepciones totalitarias del mundo, como, por ejemplo, el marxismo o el socialismo. Lo peligroso no es el revival en sí, sino unas normas, valores y actitudes que, en la mayoría de los casos, responden a intereses particulares disfrazados de generales. Y ponen en peligro la libertad, la dignidad y el futuro de nuestra civilización”. Y, en fin, para Andrés Ollero los principios fundamentales del buenismo -en este caso el jurídico- se formulan así: 1º) prohibido prohibir, 2º) tendremos, en todo caso, derecho a todo lo no prohibido, 3) no cabe imponer las propias convicciones a los demás, 4) la tolerancia nos exige un máximo reconocimiento de derechos, en lucha contra toda discriminación, 5) toda desigualdad implica discriminación y 6) derechos gratuitos.
La contradicción queda reducida a un método político operativo que no admite controversia porque si la incoherencia es denunciada se rebate con los argumentos más banales de la etapa anterior
Toda esta teorización del buenismo, formulada en 2005 por estos y otros autores, se corresponde con lo que luego ha venido sucediendo en la política española y que en este libro queda reflejado en sus líneas más generales y, a la vez, más perturbadoras y dañinas. Ahora bien: la fragilidad, la levedad, la banalidad de este relato -una suerte de storytelling- se ha derrumbado con estrépito cuando la necesidad de la gestión política se convirtió en inaplazable en 2007, y dramáticamente en 2010, con la crisis económica. El hombre sin biografía se transformó un 12 de mayo de 2009, desde el escenario, patéticamente, de la tribuna de oradores del Congreso de los Diputados, en su holograma invertido, es decir, en una imagen opuesta, de espaldas a sí mismo, de lo que fue. Y comenzó entonces y continua ahora un trote reformador renuente, peligrosamente ventajista ante los mercados internacionales y la Unión Europea, que hace preguntarse al progresismo “¿Qué te pasa Zapatero”? interrogante espetada por Cayo Lara, un comunista hermético que dirige Izquierda Unida, que no metaboliza la volatilidad ideológica del Presidente del Gobierno. El dirigente comunista y toda la izquierda extra muros del PSOE trata de recuperar la identidad arrebatada por el presidente con unas llamadas mesas de convergencia “pueblo a pueblo, barrio a barrio” como “una auténtica cruzada contra la banca y las grandes empresas que roban y destrozan el empleo”.
En realidad a Rodríguez Zapatero, en el escenario de la crisis, no le pasa absolutamente nada para intranquilidad de Lara. Sólo demuestra su capacidad adaptativa que es propia de las arquitecturas ideológicas efímeras: se cambia, se altera, se revierte porque, en último término, el poder es la tierra prometida a la que ha de llegar y en la que ha de asentarse la política. El hombre sin biografía puede perpetrar algunas, pero no históricas, contradicciones ya que nunca construyó algo sólido sino que siempre fue liviano. Persiste el discurso de envoltura trátese de lo que se trate, bien de recortar los sueldos a los empleados públicos o congelar las pensiones, derogar subsidios o subvenciones, liquidar las Cajas de Ahorro o reformar las pensiones, apostar por la energía nuclear manteniendo supuestamente la fe ecologista y “verde”. Toda mutación es posible, incluida la de fomentar el laicismo, desairar al Papa y, simultáneamente, ajustarse a los acuerdos con la Santa Sede y seguir prestando el servicio de recaudación del Estado a la Iglesia Católica. La contradicción queda reducida a un método político operativo que no admite controversia porque si la incoherencia es denunciada se rebate con los argumentos más banales de la etapa anterior. La hipocresía compendia así la actitud moral de un poder ejercido de manera errática y oportunista.
El relato de Rodríguez Zapatero no es ya creíble y la sonrisa se transforma en mueca que, sin embargo, se mantiene. No sabemos hasta cuando se prolongara ese desafío que exterioriza la izada de los labios en una forma de gestualidad que embosca tanto desconcierto como voluntad de permanecer. Pero el rostro que una vez fue comparado con el de Julia Roberts podría ser el más adecuado para una película trágica de González Iñárritu. Sus conmilitones debaten si esa faz que fue buenista y ahora quiere ser reformadora en desprendida inmolación a la patria -“Cueste lo que cueste, me cueste lo que me cueste” ha proclamado el interesado- suma o resta como si al interesado le preocupase un adarme lo que los compañeros y amigos -algunos mártires de su síndrome de hybris- puedan pensar o sospechar. Él, que no tenía biografía, que era aparentemente feliz porque carecía de bagaje para el éxito o el fracaso, se ha hecho con una a costa de España y de los españoles. Nunca nadie, antes, en una democracia puso el poder al servicio de su propio yo como José Luis Rodríguez Zapatero. Relatar cómo lo ha hecho y con cuánto coste para la sociedad española es el propósito de estas páginas que ofrezco al lector desde una experiencia personal volcada al análisis -muchas veces perplejo y otras tantas alarmado- de este hombre sin biografía que sonreía como Julia Roberts en un lejano inicio del siglo XXI.
Cuando el lector se adentre en las páginas de este libro entenderá cabalmente el sentido de su título. Porque todo el patrimonio biográfico de José Luis Rodríguez Zapatero cuando llegó a la presidencia del Gobierno tras las elecciones del 14 de marzo de 2004 podía resumirse en una sonrisa. Era entonces un hombre sin biografía, sin trayectoria, sin un bagaje de cierta relevancia. Liofilizado en dos siglas eufónicas -ZP-, el presidente era el representante de una generación socialista ideológicamente vaciada que había sustituido la doctrina izquierdista tradicional por la evanescencia del llamado progresismo. La dirección de España quedaba así en manos de un joven diputado socialista que había ocupado la bancada del PSOE en el Congreso desde 1986 sin que nadie advirtiera su presencia, catapultado al escaño desde León en donde había mostrado buenas dotes de manejo de las interioridades provinciales del partido y muy escasas tanto en la abogacía como en la docencia universitaria. Nadie conocía de él cosa alguna destacable o notable. Un grupo de compañeros que se agavillaron en torno a la denominación de Nueva Vía decidió, casi como una apuesta jocosa, lanzar a este vallisoletano recriado en tierras leonesas a competir en el 2000 con el buda socialista José Bono. Logró hacerse con la secretaria general del partido, apenas con nueve votos de diferencia, por exclusión -los delegados votaron contra los otros candidatos más que a favor de Rodríguez Zapatero- en un momento desolador para el PSOE, después de una travesía del desierto, comandados por el frustrado Almunia y el frustrante Borrell. Eligieron con los ojos cerrados, como quien lanza los dados agitando el cubilete. Saliese lo que saliese de la jugada no sería peor de lo que entonces concernía al socialismo español oscurecido por el nuevo conservatismo español que José María Aznar había guiado al poder, y disfrutándolo, con una contundencia histórica.
La página en blanco que Rodríguez Zapatero representaba reclamaba a gritos un relato, una construcción verbal coherente del quién y del para qué ese líder en esos momentos del inicio de la centuria. Y así fue como nació el andamiaje progresista en el que hasta 2008 se sostuvo la arquitectura efímera de ZP que consistió en la atribución al personaje de una serie de connotaciones progresistas que sustituían la encarnadura ideológica de una izquierda que se había quedado desde hacía ya mucho tiempo sin referentes sólidos. La generación de líderes, desde Reagan hasta Juan Pablo II, que desde troneras liberal-conservadoras, bien surtidos de claros principios de ética cívica, consiguieron cerrar la guerra fría con la caída del Muro de Berlín y provocado con ello la sepultura del socialismo real y un profundo desconcierto en la izquierda europea, sólo permitió después la emergencia de una generación ideológicamente ligera de laboristas como Tony Blair en Gran Bretaña o de socialdemócratas en Alemania como Gerhard Schröder.
En España las condiciones socio-políticas y económicas no indicaban la conclusión del ciclo conservador protagonizado desde 1996 por el Partido Popular. De no mediar la convulsión de los atentados terroristas del 11 de marzo de 2004, su gestión inadecuada por el Gobierno de Aznar y la agitación intimidante de la izquierda el día de reflexión -13 de marzo de 2004- previo a la cita con las urnas, es más que probable que los comicios los hubiera ganado Mariano Rajoy. No obstante, los dos últimos años de la segunda legislatura de Aznar, cuando ya se acercaba el plazo por él marcado para abandonar la presidencia y la candidatura a la misma por su formación política, las posibilidades de que el PP repitiese mayoría absoluta era más que inciertas días antes de los crímenes del 11-M. El sucesor de José María Aznar estaba llamado a recibir el castigo electoral que la sociedad deparaba al PP por su distanciamiento de la opinión pública nacional a propósito de la guerra de Irak y el despliegue poco púdico de algunos comportamientos incoherentes con el marchamo riguroso y sobrio que el mismo Aznar se había encargado de propugnar de forma reiterada. Rajoy pudo obtener -de no mediar la tragedia y su manejo torpe desde la Moncloa- una mayoría simple suficiente para gobernar a través de acuerdos con los grupos nacionalistas como hiciera su predecesor en 1996. De ahí que se haya afirmado con propiedad -es decir, con rigor- que Rodríguez Zapatero y el PSOE se encontraron con el poder como resultado de una concatenación de circunstancias en las que drama y torpeza se fundieron en unas jornadas trágicamente inolvidables.
Rodríguez Zapatero y el PSOE obtuvieron el poder democráticamente por más que pueda reprocharse de manera permanente la agitación y propaganda que con la peor factura del izquierdismo agreste se adueñó de la víspera electoral
Sin embargo, pese a los intentos de deslegitimación que menudearon -siendo la más grave la versión conspiratoria de la llamada autoría intelectual de los atentados terroristas del 11-M- lo cierto es que Rodríguez Zapatero y el PSOE obtuvieron el poder democráticamente por más que pueda reprocharse de manera permanente la agitación y propaganda que con la peor factura del izquierdismo agreste se adueñó de la víspera electoral. Pero aun contando que con semejante e intimidante movilización pudiera haber tenido alguna incidencia en la victoria socialista, nadie está autorizado a deslegitimarla en la medida en que por parte del Gobierno popular se produjo, simétricamente, una renuencia insalvable a la rectificación de sus iniciales versiones sobre la autoría de los atentados que se entendió en amplios sectores del electorado como un propósito doloso de engaño o simulación ventajista.
La historia se asume pero no puede alterarse y Rodríguez Zapatero ha debido convivir con esa merma de normalidad en su elección -no faltan quienes se refieren a él como el presidente por accidente- que no dejará de acompañarle cuando desaloje la Moncloa. Y esas circunstancias tan especiales son donde cuaja inicialmente el relato de Rodríguez Zapatero como un progresista de nuevo cuño que es intitulado buenista, pugnaz valedor de un nuevo talante para abordar los asuntos públicos, militante en un optimismo antropológico que le haría contemplar los problemas, por complicados que fuesen, como dificultades sorteable o superables y decidido partidario del dialoguismo. La forma de ser de izquierdas, de practicar políticas socialistas, de diferenciarse de la derecha social y política, no consistía ya en la puesta en práctica de grandes políticas alternativas en lo económico, sino en procurar un cambio en el esquema de valores sociales desde la acción del Gobierno. Rodríguez Zapatero y sus compañeros de Nueva Vía nunca se han sentido sucesores, herederos, ni siquiera legatarios, de los valores que acuñó la Transición a la democracia; tampoco de las voluntades -prácticamente testamentarias- del llamado felipismo y carecen de memoria histórica inmediata, optando, muy por el contrario por la mediata para revertir las condiciones en las que se produjo el tránsito de la dictadura a la libertad. Desde ese punto de vista, con pocas ideas políticas y mucho efectismo connotativo en sus discursos y actitudes, el llamado zapaterismo ha sido y se ha comportado como un instrumento de subversión del status alcanzado en el sistema español hasta 2004. Una subversión que, al serlo es revisionista, aliñada en conceptos inasibles, de contenido indeterminado que, sin embargo, pronto comenzaron a sistematizarse en su capacidad depredadora de lo estatuido.
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero (Reuters).
A Rodríguez Zapatero -como a las mujeres felices- le favorecía que careciese de historia, de antecedentes, de referencias vitales que lo acotasen, que le procurasen alguna forma de previsibilidad en sus acciones y omisiones. Con el presidente socialista cualquier decisión era posible: desde la precipitada e insolidaria -internacionalmente incorrecta- retirada de las tropas españolas de Irak cuando allí permanecían en condiciones durísimas las estadounidenses, británicas y de los demás países de la coalición, hasta la activación de artefactos sociales tan impactantes como la ideológica de género -matrimonio homosexual-, o la reformulación, no sólo de la Transición, sino de la forma de concordia nacional mediante la construcción ad hoc de la llamada memoria histórica o el mendaz e incompetente “proceso de paz” con la banda terrorista ETA. Y en el ámbito de las relaciones internacionales, la Alianza de las Civilizaciones. Todo ello venía justificado en las declaradas “ansias infinitas de paz” proclamadas por el presidente del Gobierno abrazado a un extraño concepto igualitarista -que no de igualdad- practicado mediante el basto procedimiento de la implantación de la cuota.
El hombre sin biografía se transformó un 12 de mayo de 2009, desde el escenario, patéticamente, de la tribuna de oradores del Congreso de los Diputados, en su holograma invertido, es decir, en una imagen opuesta, de espaldas a sí mismo, de lo que fue
Este acúmulo de progresismos -explicados siempre desde un pío entendimiento de la política como espacio de justicia—se dio en llamar con acierto buenismo. Nadie lo definió mejor que Valentí Puig para el que el buenismo se caracteriza porque “se desentiende del conflicto”, porque “lo nivela todo, todo merece la misma compasión, el mismo sentimiento, todo preocupa e inquieta”. Para el escritor mallorquín “el buenismo, al desactivar la necesidad de la política, articula toda una estrategia de amortiguación, escape o dilación.” Pero el buenismo es sólo el origen de otros comportamientos que se adhieren a él formando un corpus de acción política meramente declarativa y subversiva de lo establecido. El talante, como bien dice Puig, no es un método sino “un estar, y no una forma de ser” careciendo por tanto de autenticidad. El dialoguismo es también corolario del buenismo, y siguiendo a nuestro autor, remite a la idea de un dirigente “sin aristas, de concepciones flotantes, obligado a imprecisar sus criterios en razón de alianzas parlamentarias y llevado a su extremo la concepción “dialoguista” tiene algo de relativismo, un contravalor que se atrinchera en el pensamiento débil (…) dado que la noción de autoridad es negativa, la única autoridad posible es el diálogo”.
Para Puig “como paradigma buenista, el talante de José Luis Rodríguez Zapatero viene a combinar esa dimensión de ilusiones redescubiertas -algo así como el adanismo- con un aspecto no del todo definido y que provisionalmente podríamos etiquetar como proteccionismo moral, un proteccionismo “light”, llevadero pero cada vez más presente.”
¿Cuáles son las consecuencias -han sido- del buenismo? Siguiendo a Valentí Puig, evidentes: la consolidación de una sociedad civilmente inmadura con seria erosión de su capacidad de iniciativa al edulcorar sistemáticamente su entorno y sus fallas. El buenismo, en definitiva, “conlleva un incremento de la entrega del ciudadano al Estado, como combinación de inercias y confianzas sin contrastar. Si todo el mundo es bueno, el mal desaparece”. Para otro autor -Miquel Porta- el buenismo es “una ideología sustitutoria “post-Muro” que viene a ocupar el vacío dejado por viejas concepciones totalitarias del mundo, como, por ejemplo, el marxismo o el socialismo. Lo peligroso no es el revival en sí, sino unas normas, valores y actitudes que, en la mayoría de los casos, responden a intereses particulares disfrazados de generales. Y ponen en peligro la libertad, la dignidad y el futuro de nuestra civilización”. Y, en fin, para Andrés Ollero los principios fundamentales del buenismo -en este caso el jurídico- se formulan así: 1º) prohibido prohibir, 2º) tendremos, en todo caso, derecho a todo lo no prohibido, 3) no cabe imponer las propias convicciones a los demás, 4) la tolerancia nos exige un máximo reconocimiento de derechos, en lucha contra toda discriminación, 5) toda desigualdad implica discriminación y 6) derechos gratuitos.
La contradicción queda reducida a un método político operativo que no admite controversia porque si la incoherencia es denunciada se rebate con los argumentos más banales de la etapa anterior
Toda esta teorización del buenismo, formulada en 2005 por estos y otros autores, se corresponde con lo que luego ha venido sucediendo en la política española y que en este libro queda reflejado en sus líneas más generales y, a la vez, más perturbadoras y dañinas. Ahora bien: la fragilidad, la levedad, la banalidad de este relato -una suerte de storytelling- se ha derrumbado con estrépito cuando la necesidad de la gestión política se convirtió en inaplazable en 2007, y dramáticamente en 2010, con la crisis económica. El hombre sin biografía se transformó un 12 de mayo de 2009, desde el escenario, patéticamente, de la tribuna de oradores del Congreso de los Diputados, en su holograma invertido, es decir, en una imagen opuesta, de espaldas a sí mismo, de lo que fue. Y comenzó entonces y continua ahora un trote reformador renuente, peligrosamente ventajista ante los mercados internacionales y la Unión Europea, que hace preguntarse al progresismo “¿Qué te pasa Zapatero”? interrogante espetada por Cayo Lara, un comunista hermético que dirige Izquierda Unida, que no metaboliza la volatilidad ideológica del Presidente del Gobierno. El dirigente comunista y toda la izquierda extra muros del PSOE trata de recuperar la identidad arrebatada por el presidente con unas llamadas mesas de convergencia “pueblo a pueblo, barrio a barrio” como “una auténtica cruzada contra la banca y las grandes empresas que roban y destrozan el empleo”.
En realidad a Rodríguez Zapatero, en el escenario de la crisis, no le pasa absolutamente nada para intranquilidad de Lara. Sólo demuestra su capacidad adaptativa que es propia de las arquitecturas ideológicas efímeras: se cambia, se altera, se revierte porque, en último término, el poder es la tierra prometida a la que ha de llegar y en la que ha de asentarse la política. El hombre sin biografía puede perpetrar algunas, pero no históricas, contradicciones ya que nunca construyó algo sólido sino que siempre fue liviano. Persiste el discurso de envoltura trátese de lo que se trate, bien de recortar los sueldos a los empleados públicos o congelar las pensiones, derogar subsidios o subvenciones, liquidar las Cajas de Ahorro o reformar las pensiones, apostar por la energía nuclear manteniendo supuestamente la fe ecologista y “verde”. Toda mutación es posible, incluida la de fomentar el laicismo, desairar al Papa y, simultáneamente, ajustarse a los acuerdos con la Santa Sede y seguir prestando el servicio de recaudación del Estado a la Iglesia Católica. La contradicción queda reducida a un método político operativo que no admite controversia porque si la incoherencia es denunciada se rebate con los argumentos más banales de la etapa anterior. La hipocresía compendia así la actitud moral de un poder ejercido de manera errática y oportunista.
El relato de Rodríguez Zapatero no es ya creíble y la sonrisa se transforma en mueca que, sin embargo, se mantiene. No sabemos hasta cuando se prolongara ese desafío que exterioriza la izada de los labios en una forma de gestualidad que embosca tanto desconcierto como voluntad de permanecer. Pero el rostro que una vez fue comparado con el de Julia Roberts podría ser el más adecuado para una película trágica de González Iñárritu. Sus conmilitones debaten si esa faz que fue buenista y ahora quiere ser reformadora en desprendida inmolación a la patria -“Cueste lo que cueste, me cueste lo que me cueste” ha proclamado el interesado- suma o resta como si al interesado le preocupase un adarme lo que los compañeros y amigos -algunos mártires de su síndrome de hybris- puedan pensar o sospechar. Él, que no tenía biografía, que era aparentemente feliz porque carecía de bagaje para el éxito o el fracaso, se ha hecho con una a costa de España y de los españoles. Nunca nadie, antes, en una democracia puso el poder al servicio de su propio yo como José Luis Rodríguez Zapatero. Relatar cómo lo ha hecho y con cuánto coste para la sociedad española es el propósito de estas páginas que ofrezco al lector desde una experiencia personal volcada al análisis -muchas veces perplejo y otras tantas alarmado- de este hombre sin biografía que sonreía como Julia Roberts en un lejano inicio del siglo XXI.
sábado, 16 de abril de 2011
ZP Desastre,Desastre y desastre
Desastre, desastre, ¡¡desaaassstreeee!!
Post corto, pero directo. Me como mis palabras. La semana pasada aposté por que Zapatero, con el fin de recuperar su nombre para la Historia, adoptaría un renovado papel de estadista, con España como prioridad. Dudaba de su capacidad para ello, pero hice acto de fe. La mucha o poca inteligencia que tenga, la pondrá al servicio de su propia causa; no le queda otra, pensé. Me equivoqué de cabo a rabo. De donde no hay no se puede sacar. Este hombre es un compendio tal de incompetencia, imprudencia e ignorancia a partes iguales que hace bueno a ese Rowan Atkinson-Mr. Bean con el que tantas veces se le compara, física y conductualmente. Su capacidad para provocar incendios no tiene parangón. Oiga, ¿es el mercado? Sí mire, que los ajustes han terminado. Y para meter la pata hasta el corvejón, tampoco. Me equivoqué de fondo chino y de cantidad a invertir en las cajas españolas. Seguro que se pellizcaba el brazo cuando afirmó en su día que cualquiera puede ser presidente del gobierno en este país. Se ha empeñado con denuedo en dar fe de ello. Qué auténtico desastre.
Oiga, ¿es el mercado? Sí mire, que los ajustes han terminado
La primera de sus afirmaciones es absolutamente suicida y pone de manifiesto que, por más que pasen los meses y los años -hasta siete desde su llegada al poder-, ZP no ha aprendido absolutamente nada, ni ganas que probablemente tiene, sobre la psique de ese universo inversor y/o especulador que es quien mueve los fondos necesarios como para sostenerte o condenarte como nación. Una realidad discutible pero que está ahí, no se puede negar. No le sirvieron las experiencias de mayo o noviembre de 2010 ni la de principios de este mismo año. Total, para qué. Sigue primando en su discurso el tacticismo electoral frente a la necesidad nacional. El regalar los oídos a quienes ya no le escuchan, agobiados por el paro, el mayor coste de la vida y el peso de sus deudas. Españolito, que ves la tele, te guarde Dios.
El mensaje, sin embargo, llega nítido fuera de nuestras fronteras a quienes han visto caer a Grecia, Irlanda o Portugal y se cuestionan si no será España la siguiente. Y que lo único que piden para convencerse de que no, es que el gobierno no se salga del camino emprendido antes de tiempo. Cuando una mayoría tiene la sensación de que queda casi todo el trayecto por hacer, el que el conductor del tren se apee a las primeras de cambio es, cuando menos, alarmante. Curioso modo de generar confianza sabiendo, ¿lo sabe?, que a partir de junio las comparativas de recaudación fiscal empezarán a flojear y que una buena parte de nuestro gasto es estructural. El desatino ha sido puesto en precio por la bolsa y los diferenciales de deuda. No se engañen: no importa la boutade china, gota que colma el vaso, si no esto: la negligencia funcional del personaje.
Me equivoqué de fondo chino y de cantidad a invertir en las cajas
Lo de China es, como diría un castizo, pa mear y no echar gota. Y aunque es Zapatero el mayor responsable del error, no le anda a la zaga su equipo de colaboradores que, no nos engañemos, es el que le ha metido en este jardín. De tal palo tal astilla pues, desgraciadamente, es difícil que la mediocridad tolere brillo a su alrededor. Porque todo el mundo sabe que estos viajes se cocinan, que los acuerdos se cierran de antemano y que la cita con el gerifalte de turno no es más que el atrezzo necesario para dar algo de teatralidad a la cuestión y poner color a la foto.
El hecho de que se produzca un anuncio inmediatamente desmentido por la otra parte, que se intente salir del paso arguyendo una confusión de actores, que si públicos que si privados, y que ni siquiera las cuantías y el objeto de la inversión estén claros –lo anunciado permitiría a los chinos hacerse con un tercio del capital de las cajas, ¿es eso lo que queremos?-, pone bien a las claras la estulticia congénita de nuestros negociadores y la fatuidad de quien nos representa que debe creer que tenemos los dedos como palulús de tanto chupárnoslos.
Una metedura de pata que sigue, por cierto, al vergonzoso desmentido del Reino Unido sobre una inexistente conversación con el Príncipe Carlos sobre Gibraltar y, dentro del ámbito de las cajas, al fallido primer experimento con Qatar, que ya ha dicho Diego donde dijo digo. Pensar que va a existir un compromiso de alguien para invertir en algo que no se sabe lo que vale, es del género bobo. Y más cuando se ha optado por delegar en los mismos que han llevado a las entidades financieras a esta situación la solución del problema: sus sagaces gestores. Aliado Civilizacional: te quiero como hermano pero no como primo. Pero, ya se sabe, soñar es gratis.
Desatre, desastre, desaaaasssstrreeee...
Acabo. Desastre total, se mire por donde se mire. Que, en 24 horas, el primer ejecutivo de España, S.A. sea capaz de hacer que sus accionistas, todos y cada uno de los ciudadanos españoles, se muevan entre la indignación-preocupación por su aventurada locuacidad, que nos pone de nuevo en el disparadero de la presión internacional, y el sonrojo-cabreo por su manifiesta incapacidad, que provoca vergüenza ajena, no deja de tener su mérito. Es que ni esforzándose, vaya. Hechos que pasan factura a la imagen de la compañía ahí fuera y generan desazón y desesperación internamente. Pero aquí nadie dimite por decencia personal ni se le echa por indigencia profesional. Amigos, es lo que hay. Hasta que digamos basta de una vez por todas. ¿A qué estamos esperando? El voto manda. Reflexionen. Feliz Pascua de la Resurrección del Señor a todos.
Post corto, pero directo. Me como mis palabras. La semana pasada aposté por que Zapatero, con el fin de recuperar su nombre para la Historia, adoptaría un renovado papel de estadista, con España como prioridad. Dudaba de su capacidad para ello, pero hice acto de fe. La mucha o poca inteligencia que tenga, la pondrá al servicio de su propia causa; no le queda otra, pensé. Me equivoqué de cabo a rabo. De donde no hay no se puede sacar. Este hombre es un compendio tal de incompetencia, imprudencia e ignorancia a partes iguales que hace bueno a ese Rowan Atkinson-Mr. Bean con el que tantas veces se le compara, física y conductualmente. Su capacidad para provocar incendios no tiene parangón. Oiga, ¿es el mercado? Sí mire, que los ajustes han terminado. Y para meter la pata hasta el corvejón, tampoco. Me equivoqué de fondo chino y de cantidad a invertir en las cajas españolas. Seguro que se pellizcaba el brazo cuando afirmó en su día que cualquiera puede ser presidente del gobierno en este país. Se ha empeñado con denuedo en dar fe de ello. Qué auténtico desastre.
Oiga, ¿es el mercado? Sí mire, que los ajustes han terminado
La primera de sus afirmaciones es absolutamente suicida y pone de manifiesto que, por más que pasen los meses y los años -hasta siete desde su llegada al poder-, ZP no ha aprendido absolutamente nada, ni ganas que probablemente tiene, sobre la psique de ese universo inversor y/o especulador que es quien mueve los fondos necesarios como para sostenerte o condenarte como nación. Una realidad discutible pero que está ahí, no se puede negar. No le sirvieron las experiencias de mayo o noviembre de 2010 ni la de principios de este mismo año. Total, para qué. Sigue primando en su discurso el tacticismo electoral frente a la necesidad nacional. El regalar los oídos a quienes ya no le escuchan, agobiados por el paro, el mayor coste de la vida y el peso de sus deudas. Españolito, que ves la tele, te guarde Dios.
El mensaje, sin embargo, llega nítido fuera de nuestras fronteras a quienes han visto caer a Grecia, Irlanda o Portugal y se cuestionan si no será España la siguiente. Y que lo único que piden para convencerse de que no, es que el gobierno no se salga del camino emprendido antes de tiempo. Cuando una mayoría tiene la sensación de que queda casi todo el trayecto por hacer, el que el conductor del tren se apee a las primeras de cambio es, cuando menos, alarmante. Curioso modo de generar confianza sabiendo, ¿lo sabe?, que a partir de junio las comparativas de recaudación fiscal empezarán a flojear y que una buena parte de nuestro gasto es estructural. El desatino ha sido puesto en precio por la bolsa y los diferenciales de deuda. No se engañen: no importa la boutade china, gota que colma el vaso, si no esto: la negligencia funcional del personaje.
Me equivoqué de fondo chino y de cantidad a invertir en las cajas
Lo de China es, como diría un castizo, pa mear y no echar gota. Y aunque es Zapatero el mayor responsable del error, no le anda a la zaga su equipo de colaboradores que, no nos engañemos, es el que le ha metido en este jardín. De tal palo tal astilla pues, desgraciadamente, es difícil que la mediocridad tolere brillo a su alrededor. Porque todo el mundo sabe que estos viajes se cocinan, que los acuerdos se cierran de antemano y que la cita con el gerifalte de turno no es más que el atrezzo necesario para dar algo de teatralidad a la cuestión y poner color a la foto.
El hecho de que se produzca un anuncio inmediatamente desmentido por la otra parte, que se intente salir del paso arguyendo una confusión de actores, que si públicos que si privados, y que ni siquiera las cuantías y el objeto de la inversión estén claros –lo anunciado permitiría a los chinos hacerse con un tercio del capital de las cajas, ¿es eso lo que queremos?-, pone bien a las claras la estulticia congénita de nuestros negociadores y la fatuidad de quien nos representa que debe creer que tenemos los dedos como palulús de tanto chupárnoslos.
Una metedura de pata que sigue, por cierto, al vergonzoso desmentido del Reino Unido sobre una inexistente conversación con el Príncipe Carlos sobre Gibraltar y, dentro del ámbito de las cajas, al fallido primer experimento con Qatar, que ya ha dicho Diego donde dijo digo. Pensar que va a existir un compromiso de alguien para invertir en algo que no se sabe lo que vale, es del género bobo. Y más cuando se ha optado por delegar en los mismos que han llevado a las entidades financieras a esta situación la solución del problema: sus sagaces gestores. Aliado Civilizacional: te quiero como hermano pero no como primo. Pero, ya se sabe, soñar es gratis.
Desatre, desastre, desaaaasssstrreeee...
Acabo. Desastre total, se mire por donde se mire. Que, en 24 horas, el primer ejecutivo de España, S.A. sea capaz de hacer que sus accionistas, todos y cada uno de los ciudadanos españoles, se muevan entre la indignación-preocupación por su aventurada locuacidad, que nos pone de nuevo en el disparadero de la presión internacional, y el sonrojo-cabreo por su manifiesta incapacidad, que provoca vergüenza ajena, no deja de tener su mérito. Es que ni esforzándose, vaya. Hechos que pasan factura a la imagen de la compañía ahí fuera y generan desazón y desesperación internamente. Pero aquí nadie dimite por decencia personal ni se le echa por indigencia profesional. Amigos, es lo que hay. Hasta que digamos basta de una vez por todas. ¿A qué estamos esperando? El voto manda. Reflexionen. Feliz Pascua de la Resurrección del Señor a todos.
El Marrón de las Cajas
El espectáculo de ver cómo se intenta solucionar el “marrón” de las cajas de ahorros sin perjudicar a la clase política ha pasado de inmoral a surrealista.
Empezó siendo simplemente inmoral. La burbuja inmobiliaria se desinfló y lo lógico es que a partir de ahí se hubiera procedido a una voladura controlada de la burbuja financiera que financió la locura del ladrillo. En aquella época no habría pasado nada por proceder a una reestructuración ordenada -de verdad- del sector financiero, es decir, liquidar entidades inviables, vender otras por lo que valían -entonces todavía valían algo- y, por qué no, sacar las menos malas a bolsa. Entonces todavía habría colado. Efectivamente, en aquel momento contábamos con un colchón de provisiones genéricas único en el mundo que habría permitido la venta o salida a bolsa de algunas entidades. Otras se habrían tenido que cerrar, pero se habría podido hacer protegiendo a los clientes, en lugar de utilizar el dinero para crear el nefasto FROB.
Parecía relativamente sencillo, pero hete aquí que los políticos se dan cuenta que un proceso así comportaría auditorías (en caso de venta), “due dilligence” (en caso de salidas a bolsa) o incluso intervención judicial de oficio (en caso de quiebras o liquidaciones). Y claro, eso ponía en peligro a toda la clase política sin excepción, con su maraña de favores, influencias y pactos inconfesables. Por el hilo saldría el ovillo, y vete tú a saber dónde estaba el ovillo. Así que un cafelito y un acuerdo muy simple: “esto no nos beneficia a nadie. Si salta puede salpicar a cualquiera, porque todo el mundo está pringado y no se sabe por dónde puede saltar la liebre. Así que la solución está clara: protejámonos todos. Que no se cierre, ni se venda ni quiebre ninguna entidad. Tapemos los agujeros con dinero de los impuestos (nacimiento del FROB) y eso nos dará margen para juntar unas entidades con otras (fusiones), pasarles un trapo y darles una mano de pintura para sacarlas a bolsa y problema solucionado”.
Utilizar el dinero de los españoles para evitar que la clase política pase por los juzgados a la vez que se recortan derechos sociales e inversión pública (hospitales, colegios, etc.) es inmoral. El espectáculo posterior en que se ha convertido la “venta de la moto” es, además, surrealista.
Primer acto: “Ya me ocupo yo, que es que estoy rodeado de inútiles”
Se enorgullecía hace tiempo el presidente del Gobierno de que tuvo que ser él quien decidiera el trazado del AVE al pasar por Barcelona porque los ingenieros no se ponían de acuerdo, o algo así. En general es conocida su tendencia a estar en todo (y no digo que no lo haga con su mejor voluntad, cuidado). Y en este caso no ha sido distinto. ¿Que hay que colocar las cajas? “Ya me ocupo yo, que si no es por mi…”.
Así que el presidente orienta sus viajes a vender la moto (de la Alianza de Civilizaciones a la Diplomacia Económica). Primero en los países árabes y ahora en Asia. Y además vende como lo hace un político (lógicamente, es un político), es decir, no con números, “business plan”, análisis de riesgos y tonterías de esas típicas de los economistas, sino en plan “mira, yo tengo este problema y, si me ayudas, a cambio yo…”. Porque si no, ¿cómo se pueden vender “las cajas” en su conjunto y no una a una, si cada una es de su padre y de su madre? Lo lógico sería llevar un caso concreto, estudiarlo y ponerle precio, ¿no? O varios, pero analizados por separado y bien definidos.
Pues no, no se ha planteado así. Y, luego tenemos a los pobres actores secundarios, es decir, los propios ejecutivos de las cajas, viajando por su cuenta a buscar inversores. Y digo los ejecutivos, muchos de ellos gente seria y trabajadora que ven cómo los políticos del consejo de administración, los verdaderos culpables del desaguisado, se lavan las manos. Que trabajen los curritos. Un “show”.
Segundo acto: “engañarlos como a chinos”
Este ha sido el mejor. No entraré en el patinazo de todos conocido de los 9.000 kilos, sino en otro “show” que se ha desarrollado en paralelo, como los distintos escenarios de un festival de teatro. O más bien de un circo. Me refiero a la inocencia de muchos medios de comunicación y analistas españoles. En esta película todo el mundo habla de que los chinos iban o van a comprar cajas españolas porque les parecen un negocio interesante, y lo mismo ocurre con la deuda. Con respecto a la deuda puede ser así, ya veremos, pero ¿las cajas?
Pero cómo puede pensar tanta gente que realmente los chinos son tan fáciles de engañar. Si China acaba comprando “bancocajas” será simplemente porque a cambio España les va a dar una entrada privilegiada al mercado europeo y al propio mercado español. Para entendernos: nos sacarán del apuro a cambio de pasar del “chino” de la esquina y del restaurante “La Gran Muralla” a la fábrica de coches o de microchips, a los macrocentros comerciales, a la distribución paneuropea de sus productos a través de empresas españolas, a la licitación -a la baja- de obra pública desde empresas españolas, sin las limitaciones que tienen las chinas, a las compañías petroleras y a la tecnología española en energías limpias -básicas para su crecimiento- y, por supuesto, al sector financiero, donde los “bancocajas” y su ficha bancaria servirán como punta de lanza de operaciones realmente rentables en el mundo de la banca, los seguros, etc. Eso es lo que les interesa a los chinos, no comprar empresas (cajas) en un sector claramente sobredimensionado y donde levantar la alfombra da miedo. ¿Pero alguien se cree de verdad que ellos no saben que comprar un “bancocaja” en España es como comprar un astillero o una mina de carbón? Que aquí sobran entidades financieras, no faltan.
No digo que lo que pretenden de verdad los chinos sea ni bueno ni malo. Según se mire. Al fin y al cabo si la cosa funciona nos quitarán de encima un problema importante. El precio será alto, pero mejor pagar caro que pagar con una recesión a la japonesa. Es más, entre la “alemanización” que va a sufrir España como consecuencia de las condiciones del “aval alemán” y la competitividad y trabajo duro que nos van a imponer los chinos, esto va a ser como el libro del Lute “Camina o revienta”. O reventamos o acabamos en la “Champions League”. Y esta vez de verdad.
Empezó siendo simplemente inmoral. La burbuja inmobiliaria se desinfló y lo lógico es que a partir de ahí se hubiera procedido a una voladura controlada de la burbuja financiera que financió la locura del ladrillo. En aquella época no habría pasado nada por proceder a una reestructuración ordenada -de verdad- del sector financiero, es decir, liquidar entidades inviables, vender otras por lo que valían -entonces todavía valían algo- y, por qué no, sacar las menos malas a bolsa. Entonces todavía habría colado. Efectivamente, en aquel momento contábamos con un colchón de provisiones genéricas único en el mundo que habría permitido la venta o salida a bolsa de algunas entidades. Otras se habrían tenido que cerrar, pero se habría podido hacer protegiendo a los clientes, en lugar de utilizar el dinero para crear el nefasto FROB.
Parecía relativamente sencillo, pero hete aquí que los políticos se dan cuenta que un proceso así comportaría auditorías (en caso de venta), “due dilligence” (en caso de salidas a bolsa) o incluso intervención judicial de oficio (en caso de quiebras o liquidaciones). Y claro, eso ponía en peligro a toda la clase política sin excepción, con su maraña de favores, influencias y pactos inconfesables. Por el hilo saldría el ovillo, y vete tú a saber dónde estaba el ovillo. Así que un cafelito y un acuerdo muy simple: “esto no nos beneficia a nadie. Si salta puede salpicar a cualquiera, porque todo el mundo está pringado y no se sabe por dónde puede saltar la liebre. Así que la solución está clara: protejámonos todos. Que no se cierre, ni se venda ni quiebre ninguna entidad. Tapemos los agujeros con dinero de los impuestos (nacimiento del FROB) y eso nos dará margen para juntar unas entidades con otras (fusiones), pasarles un trapo y darles una mano de pintura para sacarlas a bolsa y problema solucionado”.
Utilizar el dinero de los españoles para evitar que la clase política pase por los juzgados a la vez que se recortan derechos sociales e inversión pública (hospitales, colegios, etc.) es inmoral. El espectáculo posterior en que se ha convertido la “venta de la moto” es, además, surrealista.
Primer acto: “Ya me ocupo yo, que es que estoy rodeado de inútiles”
Se enorgullecía hace tiempo el presidente del Gobierno de que tuvo que ser él quien decidiera el trazado del AVE al pasar por Barcelona porque los ingenieros no se ponían de acuerdo, o algo así. En general es conocida su tendencia a estar en todo (y no digo que no lo haga con su mejor voluntad, cuidado). Y en este caso no ha sido distinto. ¿Que hay que colocar las cajas? “Ya me ocupo yo, que si no es por mi…”.
Así que el presidente orienta sus viajes a vender la moto (de la Alianza de Civilizaciones a la Diplomacia Económica). Primero en los países árabes y ahora en Asia. Y además vende como lo hace un político (lógicamente, es un político), es decir, no con números, “business plan”, análisis de riesgos y tonterías de esas típicas de los economistas, sino en plan “mira, yo tengo este problema y, si me ayudas, a cambio yo…”. Porque si no, ¿cómo se pueden vender “las cajas” en su conjunto y no una a una, si cada una es de su padre y de su madre? Lo lógico sería llevar un caso concreto, estudiarlo y ponerle precio, ¿no? O varios, pero analizados por separado y bien definidos.
Pues no, no se ha planteado así. Y, luego tenemos a los pobres actores secundarios, es decir, los propios ejecutivos de las cajas, viajando por su cuenta a buscar inversores. Y digo los ejecutivos, muchos de ellos gente seria y trabajadora que ven cómo los políticos del consejo de administración, los verdaderos culpables del desaguisado, se lavan las manos. Que trabajen los curritos. Un “show”.
Segundo acto: “engañarlos como a chinos”
Este ha sido el mejor. No entraré en el patinazo de todos conocido de los 9.000 kilos, sino en otro “show” que se ha desarrollado en paralelo, como los distintos escenarios de un festival de teatro. O más bien de un circo. Me refiero a la inocencia de muchos medios de comunicación y analistas españoles. En esta película todo el mundo habla de que los chinos iban o van a comprar cajas españolas porque les parecen un negocio interesante, y lo mismo ocurre con la deuda. Con respecto a la deuda puede ser así, ya veremos, pero ¿las cajas?
Pero cómo puede pensar tanta gente que realmente los chinos son tan fáciles de engañar. Si China acaba comprando “bancocajas” será simplemente porque a cambio España les va a dar una entrada privilegiada al mercado europeo y al propio mercado español. Para entendernos: nos sacarán del apuro a cambio de pasar del “chino” de la esquina y del restaurante “La Gran Muralla” a la fábrica de coches o de microchips, a los macrocentros comerciales, a la distribución paneuropea de sus productos a través de empresas españolas, a la licitación -a la baja- de obra pública desde empresas españolas, sin las limitaciones que tienen las chinas, a las compañías petroleras y a la tecnología española en energías limpias -básicas para su crecimiento- y, por supuesto, al sector financiero, donde los “bancocajas” y su ficha bancaria servirán como punta de lanza de operaciones realmente rentables en el mundo de la banca, los seguros, etc. Eso es lo que les interesa a los chinos, no comprar empresas (cajas) en un sector claramente sobredimensionado y donde levantar la alfombra da miedo. ¿Pero alguien se cree de verdad que ellos no saben que comprar un “bancocaja” en España es como comprar un astillero o una mina de carbón? Que aquí sobran entidades financieras, no faltan.
No digo que lo que pretenden de verdad los chinos sea ni bueno ni malo. Según se mire. Al fin y al cabo si la cosa funciona nos quitarán de encima un problema importante. El precio será alto, pero mejor pagar caro que pagar con una recesión a la japonesa. Es más, entre la “alemanización” que va a sufrir España como consecuencia de las condiciones del “aval alemán” y la competitividad y trabajo duro que nos van a imponer los chinos, esto va a ser como el libro del Lute “Camina o revienta”. O reventamos o acabamos en la “Champions League”. Y esta vez de verdad.
Los Españoles Sufen en Silencio
Los españoles sufren en silencio
¿A qué se debe tanto silencio ante la crisis? ¿Somos los españoles responsables, acaso conformistas? ¿Estamos por el contrario narcotizados? ¿Es una cuestión de signo, gobierna la izquierda y los sindicatos pliegan sus pancartas y consienten? ¿O en el fondo sabemos que nada se consigue protestando?
Bruselas, Londres, Lisboa, Atenas… en cualquiera de estos puntos de Europa el pueblo ha tomado las calles. Hemos visto barricadas, enfrentamientos con la policía, fuego, cristales rotos y detenciones, pero aquí, en España, el silencio es sobrecogedor, absoluto y total. Es el mismo pueblo, los mismos problemas y la misma crisis, pero mientras Europa brama, los españoles callan.
El mutis generalizado llama aún más la atención si se tiene en cuenta que son millones las personas afectadas por la situación. Echemos un vistazo a las cifras. La EPA apunta que ya hay cerca de 5 millones de parados, a diario están cerrando una media de 450 empresas, se ha destruido el 14% del tejido empresarial, el conjunto global de los trabajadores sufre los mayores recortes sociales y laborales de la historia, la jubilación se eleva a los 67 años, los precios sufren una escalada imparable y los impuestos alcanzan máximos históricos. La situación sería como para seguir los pasos de Groucho Marx y entonar el “paren España que me bajo”, sin embargo, nada de esto sucede.
El periodista Nacho García Mostazo, especializado en economía, cree que la culpa radica en la complicidad de los sindicatos con el Gobierno, “la gente está deseando salir a la calle –explica García Mostazo-, pero no existe el catalizador para hacerlo. Se da el caldo de cultivo perfecto para que organicen no una, sino muchas manifestaciones y huelgas generales, pero gobierna la izquierda y los sindicatos, que son el factor de movilización, juegan a su favor. Que se prepare Rajoy si llega a gobernar, estoy convencido de que si conquista la Moncloa le quemarán las calles”.
El sociólogo, Amando de Miguel, ve al pueblo español anestesiado y adormecido, “aquí la gente lo aguanta todo, no hay capacidad de protesta. Es un pueblo conformista, banal, aborregado, y eso el Gobierno lo cultiva con fútbol, con ocio, con elementos ideológicos divertidos, televisión basura… mezclas todo esto y no hay conciencia de queja”. Según el sociólogo, estamos ante “el pan y circo de toda la vida, ya lo inventó Franco y ahora está elevado a una categoría extraordinaria porque hay circo todos los días”.
Bastante tenemos con salir adelante
Lejos de las tesis del adormecimiento, Carlos Rodríguez Braun, doctor en Ciencias Económicas por la Universidad Complutense de Madrid y catedrático de Historia del Pensamiento Económico, prefiere hablar de sensatez. “No estamos acostumbrados a criticar al Gobierno y tenemos demasiado respeto por la autoridad o quizás, demasiada confianza –apunta Braun-. Puede ser que seamos un pueblo sensato, que sabe que en las democracias avanzadas es muy difícil cambiar las cosas de forma radical. Imagino también que la economía sumergida provoca cierto distanciamiento y resignación. Bastante tienen muchas personas con abrirse camino como pueden. Saben que la protesta, al fin y al cabo, no lleva a ninguna parte”.
Para Carmen Tomás, periodista especializada en economía, de no ser por la familia, se estarían echando a la calle. “La gente está sosteniéndose. Necesitan a alguien para movilizarse. Antes lo hacían los sindicatos, pero ahora son cómplices del Gobierno y es la familia la que tira de los hijos que regresan a casa, el pago de la hipoteca o comer todos los días. Bastante tienen con salir adelante, están más en resolver el día a día que en protestar”.
El presidente de COPYME, Confederación de pequeñas y medianas empresas, cree que los pocos que intentan protestar se ven rápidamente silenciados. Según Salvador Bellido, “la situación es dramática para muchos empresarios, que hacen auténticos ejercicios de equilibrio para mantenerse a flote. Hay, además, miles de autónomos al borde del abismo y el consumo ha caído en picado. Yo creo que sí existe un malestar generalizado y profundo pero los grandes acallan a quienes intentamos protestar”.
Hay quienes aún creen que no hay crisis
Todavía hay quienes creen que no hay tal crisis. Seguro que no es la primera vez que escucha lo de “pues habrá crisis, pero las grandes superficies están llenas”, o a quienes dicen refunfuñando “no habrá tanta crisis cuando se han llenado los hoteles esta Semana Santa”.
De momento, no son más que ilusiones ópticas. Las superficies comerciales están abarrotadas pero los comercios cierran “mucha visita y poca compra” –se quejan los comerciantes-. Los bares se llenan pero los hosteleros despiden camareros, los ingresos caen más de un 25%, “hay quienes piden una coca-cola o un café y están toda la tarde, no se vende ni una ración”. Los hoteles están repletos estos días de Semana Santa pero muchos españoles han decidido irse al pueblo, “se llenan de alemanes que empiezan a ver la luz –nos explican en las agencias- y de turistas que huyen de la zona conflictiva del norte de África y se vienen a España”.
Las vacaciones son sagradas
El último informe sobre el ahorro de los españoles, hecho por el portal Iluba, es demoledor para las previsiones de futuro. Más del 70% reconoce que si tuviese dinero lo destinaría a ahorrar y que, ahora mismo, sólo gasta en productos básicos y de primera necesidad. Hasta un 31% reconoce haber pasado a comprar marcas blancas ante las dificultades económicas. La mayoría ha pospuesto o dejado para otra ocasión servicios como el dentista o el taller mecánico y otro dato significativo, hasta un 20% ha dejado de celebrar su cumpleaños. Sólo hay algo a lo que no se renuncia salvo necesidad extrema, las vacaciones, para el 40% son sagradas y se harán juegos malabares con los números antes que renunciar a ellas.
De momento, en medio del mar de cifras, hay un elemento objetivo y palpable que llama poderosamente la atención en esta crisis: se llama mutismo y los españoles, por unos motivos u otros, la están sufriendo… en silencio.
¿A qué se debe tanto silencio ante la crisis? ¿Somos los españoles responsables, acaso conformistas? ¿Estamos por el contrario narcotizados? ¿Es una cuestión de signo, gobierna la izquierda y los sindicatos pliegan sus pancartas y consienten? ¿O en el fondo sabemos que nada se consigue protestando?
Bruselas, Londres, Lisboa, Atenas… en cualquiera de estos puntos de Europa el pueblo ha tomado las calles. Hemos visto barricadas, enfrentamientos con la policía, fuego, cristales rotos y detenciones, pero aquí, en España, el silencio es sobrecogedor, absoluto y total. Es el mismo pueblo, los mismos problemas y la misma crisis, pero mientras Europa brama, los españoles callan.
El mutis generalizado llama aún más la atención si se tiene en cuenta que son millones las personas afectadas por la situación. Echemos un vistazo a las cifras. La EPA apunta que ya hay cerca de 5 millones de parados, a diario están cerrando una media de 450 empresas, se ha destruido el 14% del tejido empresarial, el conjunto global de los trabajadores sufre los mayores recortes sociales y laborales de la historia, la jubilación se eleva a los 67 años, los precios sufren una escalada imparable y los impuestos alcanzan máximos históricos. La situación sería como para seguir los pasos de Groucho Marx y entonar el “paren España que me bajo”, sin embargo, nada de esto sucede.
El periodista Nacho García Mostazo, especializado en economía, cree que la culpa radica en la complicidad de los sindicatos con el Gobierno, “la gente está deseando salir a la calle –explica García Mostazo-, pero no existe el catalizador para hacerlo. Se da el caldo de cultivo perfecto para que organicen no una, sino muchas manifestaciones y huelgas generales, pero gobierna la izquierda y los sindicatos, que son el factor de movilización, juegan a su favor. Que se prepare Rajoy si llega a gobernar, estoy convencido de que si conquista la Moncloa le quemarán las calles”.
El sociólogo, Amando de Miguel, ve al pueblo español anestesiado y adormecido, “aquí la gente lo aguanta todo, no hay capacidad de protesta. Es un pueblo conformista, banal, aborregado, y eso el Gobierno lo cultiva con fútbol, con ocio, con elementos ideológicos divertidos, televisión basura… mezclas todo esto y no hay conciencia de queja”. Según el sociólogo, estamos ante “el pan y circo de toda la vida, ya lo inventó Franco y ahora está elevado a una categoría extraordinaria porque hay circo todos los días”.
Bastante tenemos con salir adelante
Lejos de las tesis del adormecimiento, Carlos Rodríguez Braun, doctor en Ciencias Económicas por la Universidad Complutense de Madrid y catedrático de Historia del Pensamiento Económico, prefiere hablar de sensatez. “No estamos acostumbrados a criticar al Gobierno y tenemos demasiado respeto por la autoridad o quizás, demasiada confianza –apunta Braun-. Puede ser que seamos un pueblo sensato, que sabe que en las democracias avanzadas es muy difícil cambiar las cosas de forma radical. Imagino también que la economía sumergida provoca cierto distanciamiento y resignación. Bastante tienen muchas personas con abrirse camino como pueden. Saben que la protesta, al fin y al cabo, no lleva a ninguna parte”.
Para Carmen Tomás, periodista especializada en economía, de no ser por la familia, se estarían echando a la calle. “La gente está sosteniéndose. Necesitan a alguien para movilizarse. Antes lo hacían los sindicatos, pero ahora son cómplices del Gobierno y es la familia la que tira de los hijos que regresan a casa, el pago de la hipoteca o comer todos los días. Bastante tienen con salir adelante, están más en resolver el día a día que en protestar”.
El presidente de COPYME, Confederación de pequeñas y medianas empresas, cree que los pocos que intentan protestar se ven rápidamente silenciados. Según Salvador Bellido, “la situación es dramática para muchos empresarios, que hacen auténticos ejercicios de equilibrio para mantenerse a flote. Hay, además, miles de autónomos al borde del abismo y el consumo ha caído en picado. Yo creo que sí existe un malestar generalizado y profundo pero los grandes acallan a quienes intentamos protestar”.
Hay quienes aún creen que no hay crisis
Todavía hay quienes creen que no hay tal crisis. Seguro que no es la primera vez que escucha lo de “pues habrá crisis, pero las grandes superficies están llenas”, o a quienes dicen refunfuñando “no habrá tanta crisis cuando se han llenado los hoteles esta Semana Santa”.
De momento, no son más que ilusiones ópticas. Las superficies comerciales están abarrotadas pero los comercios cierran “mucha visita y poca compra” –se quejan los comerciantes-. Los bares se llenan pero los hosteleros despiden camareros, los ingresos caen más de un 25%, “hay quienes piden una coca-cola o un café y están toda la tarde, no se vende ni una ración”. Los hoteles están repletos estos días de Semana Santa pero muchos españoles han decidido irse al pueblo, “se llenan de alemanes que empiezan a ver la luz –nos explican en las agencias- y de turistas que huyen de la zona conflictiva del norte de África y se vienen a España”.
Las vacaciones son sagradas
El último informe sobre el ahorro de los españoles, hecho por el portal Iluba, es demoledor para las previsiones de futuro. Más del 70% reconoce que si tuviese dinero lo destinaría a ahorrar y que, ahora mismo, sólo gasta en productos básicos y de primera necesidad. Hasta un 31% reconoce haber pasado a comprar marcas blancas ante las dificultades económicas. La mayoría ha pospuesto o dejado para otra ocasión servicios como el dentista o el taller mecánico y otro dato significativo, hasta un 20% ha dejado de celebrar su cumpleaños. Sólo hay algo a lo que no se renuncia salvo necesidad extrema, las vacaciones, para el 40% son sagradas y se harán juegos malabares con los números antes que renunciar a ellas.
De momento, en medio del mar de cifras, hay un elemento objetivo y palpable que llama poderosamente la atención en esta crisis: se llama mutismo y los españoles, por unos motivos u otros, la están sufriendo… en silencio.
España no crecera hasta 2017
Cuando las previsiones del Fondo Monetario Internacional calculan que España sólo crecerá por debajo del 2% al menos hasta 2017, las alarmas de un modelo de funcionamiento socio-económico como el español, que no funciona, se han disparado. Y los empresarios -especialmente los más grandes, lastrados por la marca-España, y cuyas compañías necesitan un marco socio-laboral profundamente reformado- han comenzado a distanciarse de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales que, trabada en el diálogo social con las Centrales Sindicales, entienden que responde a un modelo superado por las circunstancias.
Aunque la elección de Juan Rosell ha sido bien acogida -y se valoran positivamente las reformas que tiene previstas para desburocratizar la organización-, la constitución del Consejo Empresarial de la Competitividad viene a ser una respuesta operativa y contemporánea a un sistema de negociaciones y acuerdos con los sindicatos propio de otros tiempos. Y así, mientras la CEOE trata con CCOO y UGT la reforma de la negociación colectiva -un acuerdo que debía haberse alcanzado en marzo y que ya se duda pueda culminarse en abril-, las diecisiete grandes compañías reunidas en la CEC han remitido al Gobierno sus propuestas al respecto, no sólo sobre este asunto -que afecta directamente a la competitividad- sino a otros varios.
Por su parte, el influyente Círculo de Empresarios de Madrid que preside Claudio Boada ha emitido una declaración institucional que dispara al corazón del endogámico e ineficiente diálogo social. Según el Círculo madrileño -en sintonía con otros en España, como el de Barcelona-, los “representantes de todos los españoles no pueden limitarse a ser meros ratificadores de un acuerdo entre partes”, y propone -con una lógica aplastante- que el debate se abra extrayéndolo de la celda en la que CEOE y Sindicatos recluyen sus negociaciones con la intención de que tanto el Gobierno como las Cortes las asuman sin más.
La discrepancia sobre el modo en que CEOE está manejando la interlocución sobre la negociación colectiva no es más que un pretexto -importante, pero pretexto- para revisar el sistema actual de relación entre las empresas y los sindicatos y de ambas instancias con el Gobierno, y, en definitiva, con el poder legislativo. Hoy por hoy, la Confederación Española de Organizaciones Empresariales se justifica en buena medida por la existencia permanente del diálogo social que es lo que, en el fondo, impugna una parte importantísima del empresariado español. El traído y llevado diálogo social pudo tener sentido en un contexto histórico, político, social y económico, diferente, no globalizado. Pero, con la crisis y sus desafíos, carece de sentido en la extensión que pretenden sus interlocutores.
El propio presidente del Gobierno, al citar directamente en dos ocasiones a los grandes empresarios y gestores de las principales compañías españolas en la Moncloa, estaba quebrando el modelo de representación empresarial. En el primero de los encuentros empresariales no acudió, por la situación personal por la que atravesaba el entonces presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán. Si asistió Juan Rosell en la segunda convocatoria, pero lo hizo, incluso hasta protocolariamente, como uno más de los ejecutivos reunidos en el palacio presidencial. El mismo Rodríguez Zapatero, estaba enviando un mensaje nítido al mundo empresarial al dispensar al líder de la CEOE un status diferente del que venía gozando hasta el momento, es decir, menos relevante y en pie de igualdad al de cualquiera de los convocados.
Obsolescencia de CEOE y las Cámaras
La escisión del empresariado en España aparece como una consecuencia -más positiva que negativa- de la propia crisis que, a algunos efectos, tiene que depurar mecanismos insolventes
Por otra parte, junto a las grandes empresas, el fortísimo Instituto de la Empresa Familiar -presidido por el propietario de Mago, Isaac Andic- se ha vinculado estrechamente al Consejo Empresarial de la Competitividad -liderado por Telefónica, los dos grandes bancos, Iberdrola y Repsol- en la misma medida en que se ha distanciado, como aquellas, de la CEOE. Mientras tanto, por el camino, ha caído Gómez-Navarro, ya ex presidente del Consejo Superior de las Cámaras de Comercio, a las que el Gobierno ha asfixiado económicamente al suprimir la obligatoriedad de afiliación de las empresas con pago de la correspondiente cuota. De tal manera que las dos grandes expresiones de la presencia articulada en la sociedad del empresariado -CEOE y Cámaras de Comercio-, han entrado en un proceso de obsolescencia casi simétrico al de las centrales sindicales cuyo papel es cada día más desvaído y que precisa de una reactualización urgente.
El cisma empresarial no está siendo traumático en las formas -la colisión entre el Círculo de Empresarios y la CEOE sí ha sido abrupta- pero ha alcanzado un alto grado de irreversibilidad. Los intereses de lo que preferentemente representa la organización empresarial tradicional -en la que se reflejan especialmente la pequeña y mediana empresa-, difieren de los de las grandes compañías que entienden superado por las circunstancias el elemento central de convergencia entre la CEOE y los Sindicatos: el diálogo social. Que no se extinguirá, pero adoptará procedimientos y maneras diferentes y, seguramente, más versátiles y menos burocratizadas.
La Constitución española, en su artículo 7º, se refiere a “los sindicatos y asociaciones empresariales” como factores de defensa y promoción de los “intereses económicos y sociales que le son propios”, pero establece que su “creación y el ejercicio de su actividad son libres dentro del respeto a la Constitución y a la ley”, añadiendo que su “estructura interna y funcionamiento deberán ser democráticos”. El precepto constitucional permite, pues, someter a revisión el modo y manera de cómo los empresarios se organizan para la defensa de sus intereses. Por otra parte, insisto en la cada vez mayor importancia de los Círculos de Empresarios que, impulsando los debates temáticos, están creando fuertes corrientes en la opinión pública.
Lo esencial, antes de que estalle un conflicto público y todavía más abierto entre la CEOE y el Consejo Empresarial para la Competitividad y el mismo Instituto de Empresa Familiar -descontado que las Cámaras de Comercio tienen ya fecha de caducidad- es que se exponga abiertamente la situación de divergencia -en la práctica, de escisión- para un reajuste de la presencia empresarial en la sociedad española con un sentido prospectivo: pensando más en el futuro difícil que se nos viene que en la reiteración de fórmulas de negociación -por ejemplo, el diálogo social- que restan margen al debate público y legislativo, que provocan endogamia negociadora y opacidad y que condicionan, no sólo al Gobierno y al Parlamento, sino, más allá de lo razonable, a un sistema empresarial diversificado y global al que el modelo actual no le sirve porque no está a altura de los retos de la globalización.
La escisión del empresariado en España aparece así como una consecuencia -más positiva que negativa- de la propia crisis que, a algunos efectos, tiene que provocar catarsis y depurar mecanismos insolventes. Y este debate empresarial no es menos importante del que afecta al papel y viabilidad de los sindicatos. Todo se está poniendo en trance de revisión: es el signo de los tiempos.
Aunque la elección de Juan Rosell ha sido bien acogida -y se valoran positivamente las reformas que tiene previstas para desburocratizar la organización-, la constitución del Consejo Empresarial de la Competitividad viene a ser una respuesta operativa y contemporánea a un sistema de negociaciones y acuerdos con los sindicatos propio de otros tiempos. Y así, mientras la CEOE trata con CCOO y UGT la reforma de la negociación colectiva -un acuerdo que debía haberse alcanzado en marzo y que ya se duda pueda culminarse en abril-, las diecisiete grandes compañías reunidas en la CEC han remitido al Gobierno sus propuestas al respecto, no sólo sobre este asunto -que afecta directamente a la competitividad- sino a otros varios.
Por su parte, el influyente Círculo de Empresarios de Madrid que preside Claudio Boada ha emitido una declaración institucional que dispara al corazón del endogámico e ineficiente diálogo social. Según el Círculo madrileño -en sintonía con otros en España, como el de Barcelona-, los “representantes de todos los españoles no pueden limitarse a ser meros ratificadores de un acuerdo entre partes”, y propone -con una lógica aplastante- que el debate se abra extrayéndolo de la celda en la que CEOE y Sindicatos recluyen sus negociaciones con la intención de que tanto el Gobierno como las Cortes las asuman sin más.
La discrepancia sobre el modo en que CEOE está manejando la interlocución sobre la negociación colectiva no es más que un pretexto -importante, pero pretexto- para revisar el sistema actual de relación entre las empresas y los sindicatos y de ambas instancias con el Gobierno, y, en definitiva, con el poder legislativo. Hoy por hoy, la Confederación Española de Organizaciones Empresariales se justifica en buena medida por la existencia permanente del diálogo social que es lo que, en el fondo, impugna una parte importantísima del empresariado español. El traído y llevado diálogo social pudo tener sentido en un contexto histórico, político, social y económico, diferente, no globalizado. Pero, con la crisis y sus desafíos, carece de sentido en la extensión que pretenden sus interlocutores.
El propio presidente del Gobierno, al citar directamente en dos ocasiones a los grandes empresarios y gestores de las principales compañías españolas en la Moncloa, estaba quebrando el modelo de representación empresarial. En el primero de los encuentros empresariales no acudió, por la situación personal por la que atravesaba el entonces presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán. Si asistió Juan Rosell en la segunda convocatoria, pero lo hizo, incluso hasta protocolariamente, como uno más de los ejecutivos reunidos en el palacio presidencial. El mismo Rodríguez Zapatero, estaba enviando un mensaje nítido al mundo empresarial al dispensar al líder de la CEOE un status diferente del que venía gozando hasta el momento, es decir, menos relevante y en pie de igualdad al de cualquiera de los convocados.
Obsolescencia de CEOE y las Cámaras
La escisión del empresariado en España aparece como una consecuencia -más positiva que negativa- de la propia crisis que, a algunos efectos, tiene que depurar mecanismos insolventes
Por otra parte, junto a las grandes empresas, el fortísimo Instituto de la Empresa Familiar -presidido por el propietario de Mago, Isaac Andic- se ha vinculado estrechamente al Consejo Empresarial de la Competitividad -liderado por Telefónica, los dos grandes bancos, Iberdrola y Repsol- en la misma medida en que se ha distanciado, como aquellas, de la CEOE. Mientras tanto, por el camino, ha caído Gómez-Navarro, ya ex presidente del Consejo Superior de las Cámaras de Comercio, a las que el Gobierno ha asfixiado económicamente al suprimir la obligatoriedad de afiliación de las empresas con pago de la correspondiente cuota. De tal manera que las dos grandes expresiones de la presencia articulada en la sociedad del empresariado -CEOE y Cámaras de Comercio-, han entrado en un proceso de obsolescencia casi simétrico al de las centrales sindicales cuyo papel es cada día más desvaído y que precisa de una reactualización urgente.
El cisma empresarial no está siendo traumático en las formas -la colisión entre el Círculo de Empresarios y la CEOE sí ha sido abrupta- pero ha alcanzado un alto grado de irreversibilidad. Los intereses de lo que preferentemente representa la organización empresarial tradicional -en la que se reflejan especialmente la pequeña y mediana empresa-, difieren de los de las grandes compañías que entienden superado por las circunstancias el elemento central de convergencia entre la CEOE y los Sindicatos: el diálogo social. Que no se extinguirá, pero adoptará procedimientos y maneras diferentes y, seguramente, más versátiles y menos burocratizadas.
La Constitución española, en su artículo 7º, se refiere a “los sindicatos y asociaciones empresariales” como factores de defensa y promoción de los “intereses económicos y sociales que le son propios”, pero establece que su “creación y el ejercicio de su actividad son libres dentro del respeto a la Constitución y a la ley”, añadiendo que su “estructura interna y funcionamiento deberán ser democráticos”. El precepto constitucional permite, pues, someter a revisión el modo y manera de cómo los empresarios se organizan para la defensa de sus intereses. Por otra parte, insisto en la cada vez mayor importancia de los Círculos de Empresarios que, impulsando los debates temáticos, están creando fuertes corrientes en la opinión pública.
Lo esencial, antes de que estalle un conflicto público y todavía más abierto entre la CEOE y el Consejo Empresarial para la Competitividad y el mismo Instituto de Empresa Familiar -descontado que las Cámaras de Comercio tienen ya fecha de caducidad- es que se exponga abiertamente la situación de divergencia -en la práctica, de escisión- para un reajuste de la presencia empresarial en la sociedad española con un sentido prospectivo: pensando más en el futuro difícil que se nos viene que en la reiteración de fórmulas de negociación -por ejemplo, el diálogo social- que restan margen al debate público y legislativo, que provocan endogamia negociadora y opacidad y que condicionan, no sólo al Gobierno y al Parlamento, sino, más allá de lo razonable, a un sistema empresarial diversificado y global al que el modelo actual no le sirve porque no está a altura de los retos de la globalización.
La escisión del empresariado en España aparece así como una consecuencia -más positiva que negativa- de la propia crisis que, a algunos efectos, tiene que provocar catarsis y depurar mecanismos insolventes. Y este debate empresarial no es menos importante del que afecta al papel y viabilidad de los sindicatos. Todo se está poniendo en trance de revisión: es el signo de los tiempos.
viernes, 15 de abril de 2011
Los Inversores Vuelven a Deshacer deuda pública Española
Los inversores vuelven a deshacer posiciones en la deuda pública española. Durante la jornada de ayer este deterioro relanzó la prima de riesgo hasta los 195 puntos básicos. Al cierre de los mercados esta brecha se redujo hasta bajar incluso de los 190 puntos.
La apertura de la jornada de hoy ya reflejaba un nuevo aumento en este diferencial, y una hora después del inicio de la jornada en la bolsa española el riesgo país acababa tocando los 200 puntos básicos.
El interés exigido al bund alemán se situaba en el 3,42%, mientras que el exigido al bono español a diez años repuntaba hasta alcanzar el 5,42%.
La brecha sigue siendo acentuada a más corto plazo. La rentabilidad del bono a tres años roza el 4%, mientras que la del bono alemán al mismo plazo cotiza en el 2,16%.
Las últimas semanas habían apaciguado un tanto las dudas de los inversores internacionales hacia el sector financiero español. Las alertas se habían concentrado en la CAM. Finalmente, a última hora de ayer se conoció el dictamen del Banco de España sobre los planes de recapitalización de los bancos y cajas, y el resultado incluye la nacionalización, además de la CAM, de CatalunyaCaixa, de Novacaixa y de Unnim.
Alertas periféricas
Los temores a una reestructuración de la deuda de Grecia, reforzados por el Gobierno alemán y por el BCE, relanzaron ayer los recelos hacia el conjunto de la deuda periférica. Los seguros de impago (CDS) del país heleno marcaron nuevos máximos, por encima de los 1.100 puntos básicos. Sus bonos a tres años se mantienen hoy al filo del 19% de interés. En Portugal, la deuda a cinco años supera el 10,5%.
La rebaja de Moody's del ráting a Irlanda, a un paso del 'bono basura', ha añadido hoy unas dosis adicionales de tensión. El diferencial de su deuda a cinco años respecto a la de Alemania se amplía hoy 20 puntos básicos, hasta los 724 puntos.
Reestructuración en Grecia
Las alarmas se dispararon ayer en el conjunto de la periferia después de que el Gobierno alemán reconociera por primera vez que Atenas podría verse forzado a reestructurar su deuda. Así lo cree un 60% de los analistas consultados por Reuters, frente al 40% respecto a Irlanda y al 30% de Portugal.
Desde el propio BCE han advertido de sus efectos. El italiano Lorenzo Bini Smaghi advertía de que "reestructurar la deuda griega implicaría una serie de efectos que tendrían que ser valorados detenidamente. Entre ellos, que la ayuda financiera dada por otros miembros de la Unión Europea no sería reembolsada, lo que significa que los contribuyentes de esos países perderían miles de millones de euros".
Hoy el mercado espera conocer los planes del Gobierno griego, que tiene previsto presentar un paquete adicional de austeridad por valor de 23.000 millones de euros entre 2012 y 2015, que permita al endeudado país sanear sus cuentas públicas.
La apertura de la jornada de hoy ya reflejaba un nuevo aumento en este diferencial, y una hora después del inicio de la jornada en la bolsa española el riesgo país acababa tocando los 200 puntos básicos.
El interés exigido al bund alemán se situaba en el 3,42%, mientras que el exigido al bono español a diez años repuntaba hasta alcanzar el 5,42%.
La brecha sigue siendo acentuada a más corto plazo. La rentabilidad del bono a tres años roza el 4%, mientras que la del bono alemán al mismo plazo cotiza en el 2,16%.
Las últimas semanas habían apaciguado un tanto las dudas de los inversores internacionales hacia el sector financiero español. Las alertas se habían concentrado en la CAM. Finalmente, a última hora de ayer se conoció el dictamen del Banco de España sobre los planes de recapitalización de los bancos y cajas, y el resultado incluye la nacionalización, además de la CAM, de CatalunyaCaixa, de Novacaixa y de Unnim.
Alertas periféricas
Los temores a una reestructuración de la deuda de Grecia, reforzados por el Gobierno alemán y por el BCE, relanzaron ayer los recelos hacia el conjunto de la deuda periférica. Los seguros de impago (CDS) del país heleno marcaron nuevos máximos, por encima de los 1.100 puntos básicos. Sus bonos a tres años se mantienen hoy al filo del 19% de interés. En Portugal, la deuda a cinco años supera el 10,5%.
La rebaja de Moody's del ráting a Irlanda, a un paso del 'bono basura', ha añadido hoy unas dosis adicionales de tensión. El diferencial de su deuda a cinco años respecto a la de Alemania se amplía hoy 20 puntos básicos, hasta los 724 puntos.
Reestructuración en Grecia
Las alarmas se dispararon ayer en el conjunto de la periferia después de que el Gobierno alemán reconociera por primera vez que Atenas podría verse forzado a reestructurar su deuda. Así lo cree un 60% de los analistas consultados por Reuters, frente al 40% respecto a Irlanda y al 30% de Portugal.
Desde el propio BCE han advertido de sus efectos. El italiano Lorenzo Bini Smaghi advertía de que "reestructurar la deuda griega implicaría una serie de efectos que tendrían que ser valorados detenidamente. Entre ellos, que la ayuda financiera dada por otros miembros de la Unión Europea no sería reembolsada, lo que significa que los contribuyentes de esos países perderían miles de millones de euros".
Hoy el mercado espera conocer los planes del Gobierno griego, que tiene previsto presentar un paquete adicional de austeridad por valor de 23.000 millones de euros entre 2012 y 2015, que permita al endeudado país sanear sus cuentas públicas.
El Cuento Chino de ZP
Libre MercadoViernes 15 de Abril
Actualizado a las 14:21:13
Buscar LDesRadioLDTVEconomíaÚltima horaOpiniónAnálisis bursátilBolsaDivisasForo6 LOS ECONÓMICOS, DE UN VISTAZO
'Financial Times' tacha de "vergonzoso" el 'cuento chino' de ZapateroNuevo patinazo de Zapatero, y esta vez clamoroso. En España algunos hablan con sorna de "cuento chino". Fuera dicen que es "vergonzoso".
Cursos especializados y programas de formación
2011-04-15Imprimir Enviar Corregir Comentar LUIS F. QUINTERO
Ayer, desde luego, no fue el día de Zapatero, que hoy tendrá que desayunar con los sonoros palos que le atiza la prensa económica. De entre los periódicos económicos, sólo las portadas de Libre Mercado y el Economista recogen el "cuento chino" del presidente. Es decir, esa filtración de que China invertiría más de 9.000 millones de euros en las cajas y que el régimen comunista desmintió en cuestión de horas. Ayer sí que fue asunto de portada en todos los, antaño llamados, "salmónidos".
En cambio, dos de los principales diarios internacionales, en sus secciones sobre Europa, recogen la "vergonzosa" rectificación que tuvo que hacer el Gobierno español después de que los chinos destaparan el engaño de Moncloa: "Madrid se ha visto obligado a hacer una aclaración vergonzosa después de señalar que España se había asegurado de China hasta 9.000 millones en inversión en sus cajas de ahorro con problemas. Una información que fue desmentida por Pekín", cuenta Financial Times.
Por su parte, Wall Street Journal, templa gaitas y se limita a contar el desmentido y las explicaciones del Gobierno de Zapatero, "fue un error de comunicación", aclara. Y eso que el propio diario compró la 'mercancía averiada' del Gobierno el pasado miércoles.
En España, los diarios nacionales también abordan con interés el asunto. Y es que "la chapuza" –según ABC- de China no es para menos. Tal y como cuenta Libre Mercado, el bulo lanzado por Moncloa de la inversión millonaria China está tipificado en el artículo 284 del código penal.
Entre los económicos es el Economista el único que lleva el ridículo de España a su portada con el "cuento chino" de las cajas: no habrá 9.300 millones pero sí ayudas al FROB. Este diario también cuenta que José Blanco se va a poner el traje de comercial inmobiliario y se marcha de gira por seis países para reducir "el stock" de viviendas sin vender en España. Lo que no sabemos es qué descuentos ofrecerá el ministro.
Mientras, sigue la guerra entre Hacienda y Trabajo que no se ponen de acuerdo en la estrategia a seguir para procurar que aflore el empleo sumergido que hay en España. Hacienda quiere multar y Trabajo no sabe qué hacer.
Hoy el "marcapasos" de Zapatero viene bien grande en la portada de este diario: "Grecia acelera el marcapasos de Zapatero" y es que la prima de riesgo de nuestro país ha subido nueve puntos hasta los 189 de diferencial con el bono alemán ante la incertidumbre que vuelve a inundar los mercados.
En Cinco Días no encontramos el desliz de Zapatero en portada y casi tampoco en páginas interiores. La información aparece en la página 30 de las 32 que componen el periódico y bajo el siguiente titular: "China reafirma su interés en las cajas pero sin definir cifras de inversión" y aclara que "Moncloa rectifica y admite que la cantidad está por negociar". Esto es cosmética editorial y no lo de las cifras del paro. Ni palabra del desmentido chino, ni del anuncio previo. Nada de nada en la entradilla, el titular o el subtítulo. Sólo en el cuerpo de la noticia en esta página par de las últimas páginas del periódico encontramos que "el Ejecutivo español se vio obligado ayer a rectificar la cifra de 9.300 millones de dólares que había adelantado un día antes el gabinete de José Luis Rodríguez Zapatero".
En Expansión la información de portada se centra en la aprobación por parte del Banco de España de los planes de las cajas. También el ajuste de empleos de Telefónica. En sumario cuenta que el FMI empeora sus datos de paro sobre España. Dice que España será el país con más parados hasta 2016
Actualizado a las 14:21:13
Buscar LDesRadioLDTVEconomíaÚltima horaOpiniónAnálisis bursátilBolsaDivisasForo6 LOS ECONÓMICOS, DE UN VISTAZO
'Financial Times' tacha de "vergonzoso" el 'cuento chino' de ZapateroNuevo patinazo de Zapatero, y esta vez clamoroso. En España algunos hablan con sorna de "cuento chino". Fuera dicen que es "vergonzoso".
Cursos especializados y programas de formación
2011-04-15Imprimir Enviar Corregir Comentar LUIS F. QUINTERO
Ayer, desde luego, no fue el día de Zapatero, que hoy tendrá que desayunar con los sonoros palos que le atiza la prensa económica. De entre los periódicos económicos, sólo las portadas de Libre Mercado y el Economista recogen el "cuento chino" del presidente. Es decir, esa filtración de que China invertiría más de 9.000 millones de euros en las cajas y que el régimen comunista desmintió en cuestión de horas. Ayer sí que fue asunto de portada en todos los, antaño llamados, "salmónidos".
En cambio, dos de los principales diarios internacionales, en sus secciones sobre Europa, recogen la "vergonzosa" rectificación que tuvo que hacer el Gobierno español después de que los chinos destaparan el engaño de Moncloa: "Madrid se ha visto obligado a hacer una aclaración vergonzosa después de señalar que España se había asegurado de China hasta 9.000 millones en inversión en sus cajas de ahorro con problemas. Una información que fue desmentida por Pekín", cuenta Financial Times.
Por su parte, Wall Street Journal, templa gaitas y se limita a contar el desmentido y las explicaciones del Gobierno de Zapatero, "fue un error de comunicación", aclara. Y eso que el propio diario compró la 'mercancía averiada' del Gobierno el pasado miércoles.
En España, los diarios nacionales también abordan con interés el asunto. Y es que "la chapuza" –según ABC- de China no es para menos. Tal y como cuenta Libre Mercado, el bulo lanzado por Moncloa de la inversión millonaria China está tipificado en el artículo 284 del código penal.
Entre los económicos es el Economista el único que lleva el ridículo de España a su portada con el "cuento chino" de las cajas: no habrá 9.300 millones pero sí ayudas al FROB. Este diario también cuenta que José Blanco se va a poner el traje de comercial inmobiliario y se marcha de gira por seis países para reducir "el stock" de viviendas sin vender en España. Lo que no sabemos es qué descuentos ofrecerá el ministro.
Mientras, sigue la guerra entre Hacienda y Trabajo que no se ponen de acuerdo en la estrategia a seguir para procurar que aflore el empleo sumergido que hay en España. Hacienda quiere multar y Trabajo no sabe qué hacer.
Hoy el "marcapasos" de Zapatero viene bien grande en la portada de este diario: "Grecia acelera el marcapasos de Zapatero" y es que la prima de riesgo de nuestro país ha subido nueve puntos hasta los 189 de diferencial con el bono alemán ante la incertidumbre que vuelve a inundar los mercados.
En Cinco Días no encontramos el desliz de Zapatero en portada y casi tampoco en páginas interiores. La información aparece en la página 30 de las 32 que componen el periódico y bajo el siguiente titular: "China reafirma su interés en las cajas pero sin definir cifras de inversión" y aclara que "Moncloa rectifica y admite que la cantidad está por negociar". Esto es cosmética editorial y no lo de las cifras del paro. Ni palabra del desmentido chino, ni del anuncio previo. Nada de nada en la entradilla, el titular o el subtítulo. Sólo en el cuerpo de la noticia en esta página par de las últimas páginas del periódico encontramos que "el Ejecutivo español se vio obligado ayer a rectificar la cifra de 9.300 millones de dólares que había adelantado un día antes el gabinete de José Luis Rodríguez Zapatero".
En Expansión la información de portada se centra en la aprobación por parte del Banco de España de los planes de las cajas. También el ajuste de empleos de Telefónica. En sumario cuenta que el FMI empeora sus datos de paro sobre España. Dice que España será el país con más parados hasta 2016
jueves, 14 de abril de 2011
Telefonica a Restructurar
Telefónica ha anunciado que está contemplando la posibilidad de reducir su plantilla en España alrededor de un 20% en los próximos tres años.
Eso quiere decir que, como cuenta con unos 32.000 trabajadores (28.000 en el negocio fijo y 4.000 en el móvil) se podría estar hablando de unos 6.400 empleados, aunque esta cifra es una mera aproximación y puede ser inferior o superior dependiendo de muchos factores, como el nivel de subcontratación que se logre en diferentes procesos y el grado de flexibilidad que se obtenga en las condiciones del convenio.
El problema para Telefónica es que esta medida es necesaria pero al mismo tiempo muy difícil de lograr. ¿Por qué? El grupo logró el pasado año casi 10.200 millones de beneficio neto (aunque más de 3.000 de estos beneficios sean un apunte contable). Con este panorama, “vender” la necesidad de una reconversión millonaria es una tarea ardua desde el punto de vista político y social, en un país con cinco millones de parados.
Sin embargo, la necesidad de recortar costes es acuciante. Hasta la crisis, Telefónica tenía la capacidad de seguir captando una parte del crecimiento del mercado a pesar de vender su ADSL casi un 50% más caro que los demás. Desde que la crisis, nos ha vuelto más “alemanes” en el comportamiento económico y miramos más el euro, la captación de Telefónica en el ADSL se ha desplomado y solo se defiende cuando mantiene agresivas políticas de descuento.
Pero últimamente ni con esa estrategia logra mantener un ritmo de captación de clientes que le permita conservar un saldo positivo. Por eso, en febrero pasado, perdió clientes de banda ancha (23.000) por primera vez en la historia. En un nuevo mercado cuyo motor fundamental es el precio, los 28.000 trabajadores que Telefónica tiene en el negocio fijo suponen un enorme coste diferencial que impide a la operadora ofrecer los niveles de precio que necesitaría para competir con sus rivales más pequeños como Jazztel, Vodafone u Orange y, al mismo tiempo, mantener la rentabilidad.
Una comparación puede ilustrar este desfase. Telefónica facturó en España 18.700 millones de euros en 2010, es decir, tres veces más que los 6.500 millones de Vodafone en su último año fiscal. Sin embargo, la plantilla de Telefónica es más de siete veces superior a los 4.200 trabajadores de su competidor, aunque hay que tener en cuenta que el negocio fijo requiere muchos más empleados. Pero eso supone que si Vodafone alcanzase el tamaño de Telefónica, podría hacerlo con una plantilla de unos 13.000 empleados, casi 20.000 menos que el ex monopolio.
Además, en este asunto no sólo se trata de la voluntad de la cúpula directiva de acometer un proceso necesariamente doloroso y que provocará muchas resistencias, sino de la posibilidad real de hacerlo. En la España actual, abordar un proceso de este tipo sin un consenso sindical total es hacer oposiciones al fracaso, y en el caso de Telefónica, alguno de los sindicatos mayoritarios no ha estado, hasta ahora, por la labor.
Eso quiere decir que, como cuenta con unos 32.000 trabajadores (28.000 en el negocio fijo y 4.000 en el móvil) se podría estar hablando de unos 6.400 empleados, aunque esta cifra es una mera aproximación y puede ser inferior o superior dependiendo de muchos factores, como el nivel de subcontratación que se logre en diferentes procesos y el grado de flexibilidad que se obtenga en las condiciones del convenio.
El problema para Telefónica es que esta medida es necesaria pero al mismo tiempo muy difícil de lograr. ¿Por qué? El grupo logró el pasado año casi 10.200 millones de beneficio neto (aunque más de 3.000 de estos beneficios sean un apunte contable). Con este panorama, “vender” la necesidad de una reconversión millonaria es una tarea ardua desde el punto de vista político y social, en un país con cinco millones de parados.
Sin embargo, la necesidad de recortar costes es acuciante. Hasta la crisis, Telefónica tenía la capacidad de seguir captando una parte del crecimiento del mercado a pesar de vender su ADSL casi un 50% más caro que los demás. Desde que la crisis, nos ha vuelto más “alemanes” en el comportamiento económico y miramos más el euro, la captación de Telefónica en el ADSL se ha desplomado y solo se defiende cuando mantiene agresivas políticas de descuento.
Pero últimamente ni con esa estrategia logra mantener un ritmo de captación de clientes que le permita conservar un saldo positivo. Por eso, en febrero pasado, perdió clientes de banda ancha (23.000) por primera vez en la historia. En un nuevo mercado cuyo motor fundamental es el precio, los 28.000 trabajadores que Telefónica tiene en el negocio fijo suponen un enorme coste diferencial que impide a la operadora ofrecer los niveles de precio que necesitaría para competir con sus rivales más pequeños como Jazztel, Vodafone u Orange y, al mismo tiempo, mantener la rentabilidad.
Una comparación puede ilustrar este desfase. Telefónica facturó en España 18.700 millones de euros en 2010, es decir, tres veces más que los 6.500 millones de Vodafone en su último año fiscal. Sin embargo, la plantilla de Telefónica es más de siete veces superior a los 4.200 trabajadores de su competidor, aunque hay que tener en cuenta que el negocio fijo requiere muchos más empleados. Pero eso supone que si Vodafone alcanzase el tamaño de Telefónica, podría hacerlo con una plantilla de unos 13.000 empleados, casi 20.000 menos que el ex monopolio.
Además, en este asunto no sólo se trata de la voluntad de la cúpula directiva de acometer un proceso necesariamente doloroso y que provocará muchas resistencias, sino de la posibilidad real de hacerlo. En la España actual, abordar un proceso de este tipo sin un consenso sindical total es hacer oposiciones al fracaso, y en el caso de Telefónica, alguno de los sindicatos mayoritarios no ha estado, hasta ahora, por la labor.
El Capital que se Necesita
Según los analistas de Macquaire, la banca europea necesita 120.000 millones para cumplir con los requisitos de capital de Basilea III. Los más necesitados son Deutsche Bank, RBS y Santander.
Las estimaciones de Macquaire se basan sobre una petición de capital principal (o core Tier 1) del 9% para el conjunto de los bancos; del 10% para las entidades con importancia sistémica, incluyendo un colchón del 3%, y del 11% para los bancos suizos.
Con estos datos, los bancos que más capital necesitan serían el alemán Deutsche Bank (17.000 millones); el británico Royal Bank of Scotland (13.000 millones); el español Santander (12.000 millones); el francés Société Générale y el italiano UniCredit (ambos con 10.000 millones). Sin embargo, los que más capital necesitan en relación a su capitalización bursátil son los italianos BPM y BPI (cerca del 90%) y Deutsche Bank (el 60%).
Entre los bancos españoles, el que sale mejor parado es Sabadell: el más solvente y el que menor necesidad tiene de capital, según el informe de Macquaire. BBVA tendría unas necesidades cercanas a los 5.000 millones, el décimo entre los europeos.
No obstante, los propios analistas reconocen que Santander y BBVA se sitúan entre los bancos que pueden evitar ampliaciones de capital, gracias a su capacidad de generar beneficios. "Debido al largo periodo de implementación de Basilea III, está en manos de los reguladores locales si fuerzan o no a sus bancos a ampliar capital en el corto plazo", apunta el informe.
En el caso de Santander, estos analistas estiman que cerrará el año con un core capital del 8,5%, algo que consideran "poco blindado". Además, recuerdan que el principal banco español pasó por los pelos la prueba del Banco de España sobre los nuevos requisitos de capital impuestos al sector financiero. No obstante, Macquaire duda de que el regulador le forzará a una ampliación de capital. Eso sí, cree que esta situación puede influir negativamente sobre el sentimiento del mercado.
Las estimaciones de Macquaire se basan sobre una petición de capital principal (o core Tier 1) del 9% para el conjunto de los bancos; del 10% para las entidades con importancia sistémica, incluyendo un colchón del 3%, y del 11% para los bancos suizos.
Con estos datos, los bancos que más capital necesitan serían el alemán Deutsche Bank (17.000 millones); el británico Royal Bank of Scotland (13.000 millones); el español Santander (12.000 millones); el francés Société Générale y el italiano UniCredit (ambos con 10.000 millones). Sin embargo, los que más capital necesitan en relación a su capitalización bursátil son los italianos BPM y BPI (cerca del 90%) y Deutsche Bank (el 60%).
Entre los bancos españoles, el que sale mejor parado es Sabadell: el más solvente y el que menor necesidad tiene de capital, según el informe de Macquaire. BBVA tendría unas necesidades cercanas a los 5.000 millones, el décimo entre los europeos.
No obstante, los propios analistas reconocen que Santander y BBVA se sitúan entre los bancos que pueden evitar ampliaciones de capital, gracias a su capacidad de generar beneficios. "Debido al largo periodo de implementación de Basilea III, está en manos de los reguladores locales si fuerzan o no a sus bancos a ampliar capital en el corto plazo", apunta el informe.
En el caso de Santander, estos analistas estiman que cerrará el año con un core capital del 8,5%, algo que consideran "poco blindado". Además, recuerdan que el principal banco español pasó por los pelos la prueba del Banco de España sobre los nuevos requisitos de capital impuestos al sector financiero. No obstante, Macquaire duda de que el regulador le forzará a una ampliación de capital. Eso sí, cree que esta situación puede influir negativamente sobre el sentimiento del mercado.
Maria Antonia Trujillo
Melchor Miralles va de bronca en bronca. Tras enzarzarse con María Antonia Iglesias, el miércoles se enfrentó a la ex ministra de Vivienda, María Antonia Trujillo. El motivo: los presuntos tratos de favor del hijo de Chaves con empresas vinculadas a la Junta de Andalucía.
María Antonia Trujillo realizó una defensa a ultranza de Manuel Chaves, sosteniendo que las actuales informaciones respondían a un movimiento mediático que pretende "con malas artes" acabar con su carrera política. Trujillo hablaba del "victorioso Chaves" y del "derrotado Arenas", y decía que se estaba haciendo mucho daño a una familia y a una empresa –Abengoa-.
Melchor Miralles le respondió "regalándole" el listado de reuniones de Iván Chaves, así como contratos y facturas en las que él firmaba como comisionista. "Todo esto no es del Partido Popular. Es ofensivo que me hables del Partido Popular", dijo el periodista.
Tras abogar Trujillo por confiar en la honestidad de Chaves y en la justicia, Miralles le espetó que lo que estaba mostrando "no es un juicio, son informaciones".
Cuando Miralles le entregó los documentos a Trujillo, esta comenzó a criticarlos hasta que confesó no haberlos leído. Cuando la exministra dijo eso, tanto Melchor Miralles como el diputado del PP Vicente Martínez Pujalte empezaron a reírse.
En un ataque de rabia, Trujillo cogió los documentos y los rompió. "¡Eso es el PSOE!", apuntaba el diputado. "¿Cómo hablas de algo que no has leído? Esto es increíble", decía Miralles. "Sin leerlo, eso te ha retratado, María Antonia", añadió el periodista.
María Antonia Trujillo realizó una defensa a ultranza de Manuel Chaves, sosteniendo que las actuales informaciones respondían a un movimiento mediático que pretende "con malas artes" acabar con su carrera política. Trujillo hablaba del "victorioso Chaves" y del "derrotado Arenas", y decía que se estaba haciendo mucho daño a una familia y a una empresa –Abengoa-.
Melchor Miralles le respondió "regalándole" el listado de reuniones de Iván Chaves, así como contratos y facturas en las que él firmaba como comisionista. "Todo esto no es del Partido Popular. Es ofensivo que me hables del Partido Popular", dijo el periodista.
Tras abogar Trujillo por confiar en la honestidad de Chaves y en la justicia, Miralles le espetó que lo que estaba mostrando "no es un juicio, son informaciones".
Cuando Miralles le entregó los documentos a Trujillo, esta comenzó a criticarlos hasta que confesó no haberlos leído. Cuando la exministra dijo eso, tanto Melchor Miralles como el diputado del PP Vicente Martínez Pujalte empezaron a reírse.
En un ataque de rabia, Trujillo cogió los documentos y los rompió. "¡Eso es el PSOE!", apuntaba el diputado. "¿Cómo hablas de algo que no has leído? Esto es increíble", decía Miralles. "Sin leerlo, eso te ha retratado, María Antonia", añadió el periodista.
Telefonica 3.500 despidos
Telefónica prepara un drástico ajuste de su plantilla en España para los próximos tres años. La operadora que preside César Alierta plantea reducir la plantilla en un 20% en el plazo de tres años dentro de un proceso de reducción de costes, según comunicaba la operadora en una presentación a la Comisión Nacional del Mercado de Valores. Telefónica cuenta con 30.000 trabajadores en España, por lo que la medida afectaría a 6.000 empleados.
Telefónica es la mayor compañía por capitalización bursátil del Ibex y la primera empresa española en superar los 10.000 millones de beneficio. En concreto, la 'teleco' obtuvo en 2010 un beneficio neto de 10.167 millones, un 30,8% más que en 2009. Esta cifra contempla la adquisición de la operadora brasileña Vivo. En el año 2010 Telefónica incrementó su deuda financiera neta en 12.042 millones de euros hasta los 55.593 millones de euros.
En la presentación remitida a la CNMV, Telefónica plantea la necesidad de iniciar un proceso de reducción de costes que incluye la externalización de procesos y de reestructuración de la plantilla que afectaría al 20 % de la misma en tres años. Telefónica ha concluido ya un proceso de reducción de sus directivos que ha afectado al 6 % de los mismos.
No obstante, fuentes de la compañía precisaron a Europa Press que es una medida más a estudiar, lo que no quiere decir que se vaya a efectuar necesariamente, y recordaron que actualmente la compañía está negociando con los sindicatos, por lo que cualquier actuación en este sentido se llevará a cabo según los cauces habituales.
En concreto, en esta presentación, se mencionan la externalización de ciertas actividades a proveedores de servicios o nuevos procesos de reestructuración en su plantilla como algunas de las medidas adicionales a aplicar para obtener una mayor flexibilidad y compensar posibles demoras en la recuperación en el país.
Telefónica menciona además la posibilidad de revisar los salarios vinculándolos más con la productividad que con el IPC. Asimismo, la firma recuerda que el propósito de reducir costes en España se recortará un 6% los puestos directivos.
De acuerdo con las cifras de la compañía, los ingresos de Telefónica en España se situaron en los 18.711 millones de euros en 2010, lo que supone un descenso interanual del 5%, debido a un menor consumo de los clientes en los diferentes negocios y a la elevada intensidad competitiva.
Margen para mejorar la eficiencia
No obstante, la firma entiende que hay margen para mejorar la eficiencia y para ello centra su enfoque comercial en el valor, frente al volumen, en gestionar los costes directos a la vez que reduce los gastos no comerciales y en el mantenimiento del margen directo sobre los ingresos.
En relación a la situación económica de las regiones en las que opera el grupo, el director de estrategia, finanzas y desarrollo de Telefónica, Santiago Fernández Valbuena, manifestó ayer miércoles durante su ponencia que todos los países se están recuperando desde una perspectiva macroeconómica, aunque con distintos ritmos.
Así, mientras Latinoamérica seguirá manteniendo su dinamismo, con un crecimiento medio anual del 4% durante los próximos tres años, España se recuperará "lentamente". Por otro lado en la presentación, la firma hace referencia a la regulación en el sector e insta a que sea más "predecible", mencionando como "temas críticos" de futuro la regulación en torno a las redes de acceso de nueva generación (NGA) y la subasta de espectro
Telefónica es la mayor compañía por capitalización bursátil del Ibex y la primera empresa española en superar los 10.000 millones de beneficio. En concreto, la 'teleco' obtuvo en 2010 un beneficio neto de 10.167 millones, un 30,8% más que en 2009. Esta cifra contempla la adquisición de la operadora brasileña Vivo. En el año 2010 Telefónica incrementó su deuda financiera neta en 12.042 millones de euros hasta los 55.593 millones de euros.
En la presentación remitida a la CNMV, Telefónica plantea la necesidad de iniciar un proceso de reducción de costes que incluye la externalización de procesos y de reestructuración de la plantilla que afectaría al 20 % de la misma en tres años. Telefónica ha concluido ya un proceso de reducción de sus directivos que ha afectado al 6 % de los mismos.
No obstante, fuentes de la compañía precisaron a Europa Press que es una medida más a estudiar, lo que no quiere decir que se vaya a efectuar necesariamente, y recordaron que actualmente la compañía está negociando con los sindicatos, por lo que cualquier actuación en este sentido se llevará a cabo según los cauces habituales.
En concreto, en esta presentación, se mencionan la externalización de ciertas actividades a proveedores de servicios o nuevos procesos de reestructuración en su plantilla como algunas de las medidas adicionales a aplicar para obtener una mayor flexibilidad y compensar posibles demoras en la recuperación en el país.
Telefónica menciona además la posibilidad de revisar los salarios vinculándolos más con la productividad que con el IPC. Asimismo, la firma recuerda que el propósito de reducir costes en España se recortará un 6% los puestos directivos.
De acuerdo con las cifras de la compañía, los ingresos de Telefónica en España se situaron en los 18.711 millones de euros en 2010, lo que supone un descenso interanual del 5%, debido a un menor consumo de los clientes en los diferentes negocios y a la elevada intensidad competitiva.
Margen para mejorar la eficiencia
No obstante, la firma entiende que hay margen para mejorar la eficiencia y para ello centra su enfoque comercial en el valor, frente al volumen, en gestionar los costes directos a la vez que reduce los gastos no comerciales y en el mantenimiento del margen directo sobre los ingresos.
En relación a la situación económica de las regiones en las que opera el grupo, el director de estrategia, finanzas y desarrollo de Telefónica, Santiago Fernández Valbuena, manifestó ayer miércoles durante su ponencia que todos los países se están recuperando desde una perspectiva macroeconómica, aunque con distintos ritmos.
Así, mientras Latinoamérica seguirá manteniendo su dinamismo, con un crecimiento medio anual del 4% durante los próximos tres años, España se recuperará "lentamente". Por otro lado en la presentación, la firma hace referencia a la regulación en el sector e insta a que sea más "predecible", mencionando como "temas críticos" de futuro la regulación en torno a las redes de acceso de nueva generación (NGA) y la subasta de espectro
Rebajar La Plantilla un 20%
Telefónica estudia recortar un 20% su plantilla en España en tres años La compañía quiere potenciar la productividad y la flexibilidad de su actividad en España y contempla recortar un 20% su plantilla en tres años.
TELEFONICA Últ.
17,78
Dif.
-0,23
Dif%.
-1,25%
Últ. Act.
14:35
Información diferida 15 min. © fuente infobolsa
Documento: Plan Estratégico de Telefónica
Cursos especializados y programas de formación
Dividendo del 1,75 euros en 2012
2011-04-14Imprimir Enviar Corregir Comentar Libre mercado
Telefónica estudia nuevas formas para potenciar la productividad y la flexibilidad de su actividad en España y contempla, entre otras fórmulas, recortar un 20% su plantilla en tres años, según una presentación remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
En concreto, en esta presentación, se mencionan la externalización de ciertas actividades a proveedores de servicios o nuevos procesos de reestructuración en su plantilla como algunas de las medidas adicionales a aplicar para obtener una mayor flexibilidad y compensar posibles demoras en la recuperación en el país.
Telefónica menciona además la posibilidad de revisar los salarios vinculándolos más con la productividad que con el IPC. Asimismo, la firma recuerda que el propósito de reducir costes en España se recortará un 6% los puestos directivos.
En este sentido, el presidente de Telefónica de España, Guillermo Ansaldo, afirmó este jueves que "estamos preparados para empezar las negociaciones con los sindicatos" para poner en marcha iniciativas que irán desde la externalización de procesos a la reestructuración de personal.
En su intervención ante la conferencia de inversores que está celebrando Telefónica en Londres, el responsable del negocio en España señaló que la mayor parte del recorte del 20% del personal de la operadora en los próximos tres años, sería en la telefonía fija.
El presidente de Telefónica de España anunció que en el periodo 2011-2013 tienen previsto conseguir 600 millones de euros con la venta de activos no estratégicos como activos inmobiliarios y aplicaciones de tecnologías de la información. Además optimizarán el uso de su capital a través de la co-inversión en infraestructuras de fibra óptica en para compartir redes móviles.
"No es momento", según Trabajo
Ante el recorte de plantilla anunciado, el ministro de Trabajo e Inmigración, Valeriano Gómez, afirmó que no es un buen momento para producir ajustes de plantilla "en un tamaño tan importante".
"Sabemos que nuestras compañías internacionales compiten en mercados difíciles y tienen exigencias en ese sentido", apuntó el ministro de Trabajo, aunque subrayó que en Telefónica hay "tradición" de diálogo y consenso con los representantes sindicales.
Por tanto, dijo que espera que ambas partes sean capaces de alcanzar decisiones como lo han hecho en el pasado. Gómez señaló que Telefónica tendrá que negociar esta decisión con sus representantes sindicales, abordar todo el proceso habitual en estos casos y finalmente "tendrá que pactar la decisión".
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Cursos especializados y programas de formación
Dividendo del 1,75 euros en 2012
2011-04-14Imprimir Enviar Corregir Comentar Libre mercado
Telefónica estudia nuevas formas para potenciar la productividad y la flexibilidad de su actividad en España y contempla, entre otras fórmulas, recortar un 20% su plantilla en tres años, según una presentación remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
En concreto, en esta presentación, se mencionan la externalización de ciertas actividades a proveedores de servicios o nuevos procesos de reestructuración en su plantilla como algunas de las medidas adicionales a aplicar para obtener una mayor flexibilidad y compensar posibles demoras en la recuperación en el país.
Telefónica menciona además la posibilidad de revisar los salarios vinculándolos más con la productividad que con el IPC. Asimismo, la firma recuerda que el propósito de reducir costes en España se recortará un 6% los puestos directivos.
En este sentido, el presidente de Telefónica de España, Guillermo Ansaldo, afirmó este jueves que "estamos preparados para empezar las negociaciones con los sindicatos" para poner en marcha iniciativas que irán desde la externalización de procesos a la reestructuración de personal.
En su intervención ante la conferencia de inversores que está celebrando Telefónica en Londres, el responsable del negocio en España señaló que la mayor parte del recorte del 20% del personal de la operadora en los próximos tres años, sería en la telefonía fija.
El presidente de Telefónica de España anunció que en el periodo 2011-2013 tienen previsto conseguir 600 millones de euros con la venta de activos no estratégicos como activos inmobiliarios y aplicaciones de tecnologías de la información. Además optimizarán el uso de su capital a través de la co-inversión en infraestructuras de fibra óptica en para compartir redes móviles.
"No es momento", según Trabajo
Ante el recorte de plantilla anunciado, el ministro de Trabajo e Inmigración, Valeriano Gómez, afirmó que no es un buen momento para producir ajustes de plantilla "en un tamaño tan importante".
"Sabemos que nuestras compañías internacionales compiten en mercados difíciles y tienen exigencias en ese sentido", apuntó el ministro de Trabajo, aunque subrayó que en Telefónica hay "tradición" de diálogo y consenso con los representantes sindicales.
Por tanto, dijo que espera que ambas partes sean capaces de alcanzar decisiones como lo han hecho en el pasado. Gómez señaló que Telefónica tendrá que negociar esta decisión con sus representantes sindicales, abordar todo el proceso habitual en estos casos y finalmente "tendrá que pactar la decisión".
PC CITY se va de España
Dixons Retail, propietario de la cadena de tiendas de informática PC City, ha decidido iniciar formalmente el proceso de salida del mercado español, debido a la progresiva caída del consumo, a las pérdidas acumuladas por la cadena y a los planes del grupo para centrar su actividad en tiendas combinadas de informática y electrónica.
Tras estudiar todas las opciones posibles, la compañía ha adoptado esta medida, que supondrá el cierre de todos los centros de trabajo (34 tiendas y la sede central) y de su web de comercio on line y afectará a la totalidad de su plantilla, compuesta por 1.224 empleados.
La dirección de PC City ha informado de esta decisión a los representantes de los trabajadores con el fin iniciar los trámites legales necesarios para llevar a cabo el preceptivo Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que se presentará ante la Autoridad Laboral competente.
A pesar de ello, la dirección de PC City España está explorando todas las vías posibles para buscar soluciones que permitan salvar el mayor número posible de empleos.
Asimismo, según señaló la compañía, el equipo directivo de PC City España tiene la voluntad de intentar alcanzar el acuerdo más beneficioso posible en las negociaciones con los representantes de los trabajadores, a pesar de la difícil situación de PC City España en el entorno económico actual.
El grupo británico subrayó que el cese de la actividad de PC City no afectará a las garantías y obligaciones que la empresa tiene contraídas con sus clientes, ya que asegura el cumplimiento de todas las prestaciones previstas en los programas de servicio.
Tras estudiar todas las opciones posibles, la compañía ha adoptado esta medida, que supondrá el cierre de todos los centros de trabajo (34 tiendas y la sede central) y de su web de comercio on line y afectará a la totalidad de su plantilla, compuesta por 1.224 empleados.
La dirección de PC City ha informado de esta decisión a los representantes de los trabajadores con el fin iniciar los trámites legales necesarios para llevar a cabo el preceptivo Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que se presentará ante la Autoridad Laboral competente.
A pesar de ello, la dirección de PC City España está explorando todas las vías posibles para buscar soluciones que permitan salvar el mayor número posible de empleos.
Asimismo, según señaló la compañía, el equipo directivo de PC City España tiene la voluntad de intentar alcanzar el acuerdo más beneficioso posible en las negociaciones con los representantes de los trabajadores, a pesar de la difícil situación de PC City España en el entorno económico actual.
El grupo británico subrayó que el cese de la actividad de PC City no afectará a las garantías y obligaciones que la empresa tiene contraídas con sus clientes, ya que asegura el cumplimiento de todas las prestaciones previstas en los programas de servicio.
Mayoria Absoluta en Todas las Capitales Andaluzas: La Via a la Normalidad
La madre de todas las batallas electorales en Andalucía, el próximo 22-M, estará en la conquista de Sevilla, tradicional feudo socialista. En los últimos comicios, el Partido Popular ya ganó por mayoría, pero la suma entre PSOE e Izquierda Unida impidió un alcalde popular.
Las últimas encuestas hechas públicas en medios de comunicación auguraban una mejora sensible del partido que dirige Javier Arenas en las elecciones locales -cabe recordar que, como comunidad histórica, Andalucía celebra las autonómicas en fechas diferentes- pero la capital hispalense seguía resistiéndose... hasta ahora.
Según los últimos sondeos internos de Génova, a los que tuvo acceso Libertad Digital, el PP conseguirá mayoría absoluta en la ciudad del Guadalquivir, no dando opción de alianza al PSOE. La euforia se ha instalado en la dirección nacional: "Estamos seguros de que ganaremos", afirma rotundo uno de sus miembros.
Mayoría absoluta en Córdoba y Jaén
Además, Arenas está más convencido que nunca de que en la noche electoral de mayo se dibujará una comunidad bañada por el azul; todas las capitales de provincia a manos de alcaldes populares. Según las citadas encuestas para consumo interno, en las otras dos capitales en las que no tienen el poder, Córdoba (IU) y Jaén (PSOE), también se producirá el cambio. En el caso cordobés la subida será "espectacular", según las fuentes consultadas.
Pero, aún más, lo que espera el PP es un crecimiento de entre un 8 y 10% en las ciudades medias andaluzas, incluidas aquellas que se encuentran en el interior, lo que también provocará el vuelco electoral en determinadas Diputaciones Provinciales, como es el caso de Málaga. Asimismo, esperan incrementar su ventaja en aquellas localidades donde ya gobiernan, creándose verdaderos 'cinturones azules', por ejemplo, en la Costa del Sol Occidental.
La llave de la La Moncloa
Si las previsiones se cumplen, el PP andaluz afrontará con músculo su reto más decisivo: la conquista de la Junta. "Evidentemente, un buen resultado el 22-M será el trampolín perfecto para ganar las elecciones autonómicas", y por ello Arenas ve la cita con las urnas de mayo como su propio plebiscito. Y es que en Génova trabajan con la hipótesis de que se producirá un efecto dominó en la intención de voto de los andaluces.
En el PP-A intentan esconder el optimismo desbordado, pero admiten que las últimas encuestas le dan la mayoría suficiente para desbancar al socialismo del poder. Creen que el melón de la corrupción que ahora se ha abierto ya no se cerrará, y que cada día irá a más. Que a ello se sumará la grave crisis interna del equipo de José Antonio Griñán. "Andalucía será la llave de La Moncloa para Rajoy", no se cansa de repetir Arenas en sus actos.
Las últimas encuestas hechas públicas en medios de comunicación auguraban una mejora sensible del partido que dirige Javier Arenas en las elecciones locales -cabe recordar que, como comunidad histórica, Andalucía celebra las autonómicas en fechas diferentes- pero la capital hispalense seguía resistiéndose... hasta ahora.
Según los últimos sondeos internos de Génova, a los que tuvo acceso Libertad Digital, el PP conseguirá mayoría absoluta en la ciudad del Guadalquivir, no dando opción de alianza al PSOE. La euforia se ha instalado en la dirección nacional: "Estamos seguros de que ganaremos", afirma rotundo uno de sus miembros.
Mayoría absoluta en Córdoba y Jaén
Además, Arenas está más convencido que nunca de que en la noche electoral de mayo se dibujará una comunidad bañada por el azul; todas las capitales de provincia a manos de alcaldes populares. Según las citadas encuestas para consumo interno, en las otras dos capitales en las que no tienen el poder, Córdoba (IU) y Jaén (PSOE), también se producirá el cambio. En el caso cordobés la subida será "espectacular", según las fuentes consultadas.
Pero, aún más, lo que espera el PP es un crecimiento de entre un 8 y 10% en las ciudades medias andaluzas, incluidas aquellas que se encuentran en el interior, lo que también provocará el vuelco electoral en determinadas Diputaciones Provinciales, como es el caso de Málaga. Asimismo, esperan incrementar su ventaja en aquellas localidades donde ya gobiernan, creándose verdaderos 'cinturones azules', por ejemplo, en la Costa del Sol Occidental.
La llave de la La Moncloa
Si las previsiones se cumplen, el PP andaluz afrontará con músculo su reto más decisivo: la conquista de la Junta. "Evidentemente, un buen resultado el 22-M será el trampolín perfecto para ganar las elecciones autonómicas", y por ello Arenas ve la cita con las urnas de mayo como su propio plebiscito. Y es que en Génova trabajan con la hipótesis de que se producirá un efecto dominó en la intención de voto de los andaluces.
En el PP-A intentan esconder el optimismo desbordado, pero admiten que las últimas encuestas le dan la mayoría suficiente para desbancar al socialismo del poder. Creen que el melón de la corrupción que ahora se ha abierto ya no se cerrará, y que cada día irá a más. Que a ello se sumará la grave crisis interna del equipo de José Antonio Griñán. "Andalucía será la llave de La Moncloa para Rajoy", no se cansa de repetir Arenas en sus actos.
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