miércoles, 17 de agosto de 2011

El Ibex en 2011

Los recientes acontecimientos en los mercados financieros han vuelto a despertar temores entre el público por la estabilidad económica y el futuro de sus inversiones; pues bien, hoy intentaremos ayudarles a aclarar qué está pasando en los mercados de acciones. Veremos de forma muy resumida que los mercados bursátiles tienen un patrón cíclico de largo plazo que se desarrolla en dos fases, una bajista y otra alcista, y que también siguen un patrón en la formación de suelo de los precios. Pero antes de entrar en ellas es importante que el lector recuerde que hay dos arquetipos de inversor y se ubique en el grupo al que pertenece. Esa evaluación deben hacerla con todo el que hable de la Bolsa, especialmente si intenta que ustedes le dejen sus ahorros.

Inversores bajistas: o Bears (Osos), son aquéllos que tienen una visión conservadora del precio de las acciones y tienden a pensar que el mercado está caro, que los dividendos son sagrados y por lo regular bajos, y que las intervenciones gubernamentales solo crean alzas temporales o ponen las cosas peor. Son mesurados, cautelosos, meticulosos, vigilantes, prudentes, largo-placistas; cumplen una función inhibidora en el Sistema. Por ejemplo, los banqueros centrales, además de ser competentes en su oficio, que evidentemente no es el caso español, deberían tener una personalidad que respondiera a este arquetipo.

Quien les escribe es bajista y en estos días más que nunca, tal vez demasiado, entre otras cosas porque es lo que toca, así que han de pensar que, aunque la estadística no miente, lo que leen está escrito bajo ese prisma. Lo que el lector leerá en este artículo es un resumen con lo esencial de mi modelo de inversión bursátil, que puede usar como desee con la salvedad de que las decisiones de inversión que tome son responsabilidad suya, no mía; yo simplemente lo explico, si la usa bien o no ya no depende de mí, simplemente la expongo.

Inversores alcistas: o Bulls (Toros), tienen una visión expansiva del mercado, que “todo” está barato, siempre encuentran argumentos para la subida de los precios y realizar una “buena” compra, tienden a la euforia, la animación, el optimismo y el riesgo. Realizan una función expansiva en el Sistema.

Estos arquetipos están ahí casi desde que existen los mercados de acciones y no por capricho, sino que vienen de una larga y continua comprobación de los mismos por parte de la comunidad de inversores; no es pues una casualidad que la lucha entre osos y toros simbolice a los mercados de financieros y en concreto a la Bolsa. Adicionalmente, estos arquetipos son de gran utilidad en el mundo de los negocios, por ejemplo en las contrataciones y formación de equipos de trabajo, y sobre todo cuando se les complementa dándoles un enfoque generacional.

Hay un tercer grupo “informal” llamado Pigs (Cerdos) que son los que siempre pierden. Este grupo ‘medio se arruinó’ con la burbuja puntocom, reincidió en el inmobiliario y el crack del 2008, con el actual y será casquería de lo que venga, en la bolsa, materias primas, divisas, ¿oro, franco suizo? Ya saben, del cerdo se aprovecha todo. Estos individuos creen que invertir en bolsa es como “leer el Marca, hablar de fútbol y hacer quinielas” y cuando pierden siempre largan contra el Sistema.

Fases Seculares del Mercado Bursátil:

Para ilustrar esas fases lo que haré será llevar los datos de cierre anual de un Índice bursátil a precios constantes, esto es, eliminar el efecto de la inflación y veremos cómo se comporta. El índice es el Dow Jones Industriales, que es uno de los que se tiene información más antigua y que hará de muestra representativa del valor real de las acciones en el muy largo plazo, más de un siglo; en otros índices el patrón es prácticamente el mismo. Utilizaré el Indice de Precios al Consumo para deflactar la serie en la lógica de que el patrimonio se intenta conservar para mantener y respaldar el nivel de vida del inversor, de esta manera veremos qué ocurre a ese patrimonio en términos reales si el inversor replica al Índice en su cartera de acciones y lo hace desde 1896. El resultado lo tienen en la siguiente gráfica, donde en el eje vertical de la izquierda tienen el valor nominal del índice (línea azul) y en el de la derecha el valor real (línea negra); las fases seculares las determina el valor real, siendo las flechas verdes las fases seculares alcistas y las rojas las bajistas; obviamente alternas.



En este enlace: real returns S&P pueden buscar esas fases en otro índice, con o sin dividendo, aunque con otro año base y datos no anuales. Además, el cálculo de rentabilidad real que dan oculta la fase bajista entre tres décadas. Nosotros haremos el análisis solo desde el punto de vista patrimonial (sin dividendos), ya que pensamos estar en bolsa la mayor parte del tiempo pero solo si podemos proteger el patrimonio bursátil real.

En líneas generales puede esperarse que la fase secular bajista sea más larga que la alcista precedente, sobre todo si en esta última la euforia alcista es más abrupta como es el caso que padecemos. Pero además de esa conclusión estructural podemos llegar a otras. Veamos cuáles:

¿Es siempre rentable la bolsa a Largo Plazo?

Si por Largo Plazo se entiende un Saeculum, un siglo, más o menos, sí; pero si somos realistas y lo que consideramos es un período largo, unos 20 años, en que el inversor construye un patrimonio para su jubilación, la respuesta es: No, la bolsa no siempre es rentable a Largo Plazo, a menos que se realice una cobertura adecuada. Pensemos, en un inversor de nuestra Generación Perdida, que no es la del 15M, que decidió empeñarse (nunca mejor dicho) en mantener de forma inamovible una parte fija de su fondo en acciones desde 1996 (enlace gráfica), podría terminar con un patrimonio real bastante magro a finales de 2016 (y siguientes)

Con una perspectiva realista de Largo Plazo, la inversión en Bolsa también puede ser la ruina más calamitosa. Imaginen un inversor que construyera su patrimonio accionarial replicando el índice desde 1901 y sigan la línea negra durante los distintos años de la gráfica. De modo que déjense de mantras tontos repetidos por comerciales de fondos XYZ y piensen que ustedes ocupan un lugar distinto en el mostrador de contratación, el de que interesa que abra o mantenga un fondo X que da una comisión x a su gestor con independencia de que usted gane o pierda.

Bueno, ¿y qué se puede hacer en esta Fase Bajista que se promete larga? Lo primero, no empeñarse en un esquema fijo de inversión, pues los descensos seculares en el valor real no ocurren de manera constante (en línea recta), sino que viven momentos de alzas contra la tendencia secular, que ocurre tras un suelo bajista y que también parecen seguir un patrón. Así que ha de buscarse un instrumento de inversión flexible que permita salir del mercado bursátil y volver una vez se ha construido un suelo; piensen que estamos en una fase bursátil de altísimo riesgo solo para profesionales, muchos de los cuales perderán hasta la camisa.

Previsión de Suelos Bajistas. Mi enfoque sobre este particular es el siguiente:

Si estudiamos las cuatro fases seculares bajistas (FSB) del primer gráfico (la última, la actual, está en desarrollo), veremos que tienden a hacer, en base anual, cuatro mínimos decrecientes, esto es, que cada suelo bajista es menor que el anterior y que se dan por sucesivas capitulaciones menores hasta la cuarta y final que es la que fija el suelo real de la fase, siendo ése el momento ideal para construir una cartera a largo plazo; pienso que actualmente el mercado está buscando hacer ese tercer suelo temporal de la serie que suele ocurrir hacia el año 12 de la FSB. Mi estimación para el tercer suelo la pueden ver en la línea punteada negra del siguiente gráfico, y les invito a que cada uno se haga la suya a partir de donde intercepta la línea vertical y la vayan corrigiendo según los acontecimientos se lo indiquen; o sea, esa línea punteada no es la definitiva para lo que queda de esta Fase Secular Bajista (2000-2016), si no que habría que ir adaptándose.



Este tercer suelo coincidirá con el suelo de una hoy más que previsible recesión en formación y que podría durar hasta finales del año 12, que en este caso coincide con 2012. Si tienen un gestor de fondos que no abre posiciones cortas (ventas de acciones que no se tienen y que luego se comprarán a precios más bajos) y éste, llegado el “suelo” les parece que tarda (1-3 meses) en abrir largos (comprar), no le metan excesivas prisas, que seguramente es un buen gestor de patrimonios. La clave en ese momento (2012) será el perfil del ciclo de los negocios (7-9 años) que viene desde 2009 y que aún está por aclararse, aunque mi previsión desde 2009 ya la conocen: el doble picado.

El caso del período 1929-1949 es peculiar (línea fina en granate), que incluso ha habido que darle de comer aparte poniendo su escala en la vertical derecha de la gráfica. Es un caso particular, pues además de que hubo que “reiniciar” el Sistema, cuando Roosevelt tomó posesión el sistema bancario estaba cerrado por los pánicos bancarios y en la segunda mitad de la FSB hubo además una guerra mundial, la peor; lo primero explicaría que el primer suelo estuviera en la zona de capitulación final y lo segundo que el último suelo estuviera más arriba.

En una próxima ocasión trataremos una forma de llevar los valores reales de esa última gráfica al momento actual y con más detalles, si se puede ganar dinero y cómo estar a cubierto en la Fase Secular Bajista, si la Bolsa es un timo (adelanto que no), y cómo veo el Ibex. Suerte y cuídense.

*Luis Riestra Delgado es economista.

No hay comentarios:

Publicar un comentario